La vida está llena de sustantivos abstractos cuya concreción es clave. Amistad es uno. Como cualquier concepto escolar –está incluido en el programa de Sociología en varios colegios- requiere del aprendizaje de su definición y de la capacidad de reconocerlo como pieza clave de la socialización secundaria.
Vaya si es importante destinar tiempo en clase a este tema. Así como los medios de comunicación forman agenda y establecen conversaciones entre la gente, la escuela puede dejar temas en los diálogos de los alumnos. Al hacerlo, ayuda a que se miren, reflexionen y brinden un ejemplo de teoría puesta en práctica para enriquecer la vida en amistad.
La educación, otra de las unidades de la asignatura, ofrece alternativas respecto de conceptos de esta naturaleza. La película “Perfume de mujer” muestra a una institución que en el nombre de un código de honor estimulaba a los estudiantes a acusar a sus compañeros. Es posible imaginar a sus autoridades enfocadas en la precisión para definir “amistad” sin que les importara un comino si los cursantes eran amigos.
A muchos treintañeros y mayores nos resulta familiar la consigna “les doy un ejercicio, el que lo termina primero se va”. Es cierto que salir antes era flor de motivación. Tan cierto como que premios así sembraban el “salvate vos, los demás que se embromen”. Por ponerles rótulo sociológico, el premio (reverso de las sanciones en el control social) resultaba apetecible pero la socialización (el aprendizaje a través de la vida) era mala.
Palabras para referir a acciones. Y acciones que merecen palabras: dos amigas estaban distanciadas. Su grandeza –valores, en términos de Etica- las condujo a restablecer el vínculo. Al margen de su excelente rendimiento en Lengua Castellana, lo que las guió al abrazo fue su don de gente, que les permite enseñar concretamente tan hermosa lección relativa a un sustantivo abstracto.
Un blog variopinto, con textos ligados a pensamientos, sensaciones, descripciones, narraciones, sentimientos, ocurrencias y reflexiones sobre temas periodísticos sin correr tras primicias. Miradas acerca de lo que nos pasa, lo que nos gustaría, lo que perdimos y lo que soñamos.
30/9/10
27/9/10
Largo camino e inevitable final
Por Jose Espinosa, sexto año IPEM 252 de Río de los Sauces
El llorar es algo inevitable en una despedida. Un adiós marca un nuevo comienzo. Jamás olvidaré mi paso por la secundaria. A mis amigos, compañeros, profesores y preceptores los llevo en mi corazón.
Lo más triste es el momento del adiós, las lágrimas y los mocos inundan las mejillas de todos los rostros.
Es inevitable saber que nunca volverán esos tiempos. Llorar en la despedida es inevitable como es inevitable borrar de mi corazón esos gratos recuerdos.
Se extrañarán esos lazos afectivos que se construyen durante seis años. En el momento de la despedida te das cuenta de cuán importante son esas personas en tu vida, esos que ves de lunes a viernes son parte de vos.
Esos días de risas, alegrías, emociones, cuando todo nos causaba gracia, son los días que extrañaré de la secundaria.
Pese a que el aula no nos representa, voy a llorar mucho el eterno adiós, nunca volverá a ser todo como antes, lloraré al saber que todo se esfumó.
El llorar es algo inevitable en una despedida. Un adiós marca un nuevo comienzo. Jamás olvidaré mi paso por la secundaria. A mis amigos, compañeros, profesores y preceptores los llevo en mi corazón.
Lo más triste es el momento del adiós, las lágrimas y los mocos inundan las mejillas de todos los rostros.
Es inevitable saber que nunca volverán esos tiempos. Llorar en la despedida es inevitable como es inevitable borrar de mi corazón esos gratos recuerdos.
Se extrañarán esos lazos afectivos que se construyen durante seis años. En el momento de la despedida te das cuenta de cuán importante son esas personas en tu vida, esos que ves de lunes a viernes son parte de vos.
Esos días de risas, alegrías, emociones, cuando todo nos causaba gracia, son los días que extrañaré de la secundaria.
Pese a que el aula no nos representa, voy a llorar mucho el eterno adiós, nunca volverá a ser todo como antes, lloraré al saber que todo se esfumó.
24/9/10
Darse cuenta, nada menos
La noción “me di cuenta, me decepcioné” guió la redacción de algunas frases cortas que se leen tras dos párrafos.
De paso, una sugerencia: “Darse cuenta”, película de Alejandro Doria, con monumentales actuaciones de Luis Brandoni, Darío Grandinetti y China Zorrilla. Un fresco agobiante por hospitales públicos en la Argentina de los ochenta y por actitudes que ante un moribundo pueden tener hermanos, cuñados, médicos y enfermeras.
Algunos eligen creen pese a lo que ven. Otros optan por el pesimismo, una de cuyas rimas es facilismo.
La obra cuenta con silencios densos, de los que se pueden padecer en la vida cotidiana y por los que cabe agradecer en el cine. Y para que la música no se extrañe, una versión del tema “La Maza” para el elogio, el pensamiento y el tarareo.
-Me di cuenta de que mi amiga no trabaja de relacionista pública sino de… ustedes sabrán entender.
-Si el ratón Pérez dejara monedas por cada diente que se lleva, el viejo de la esquina sería millonario.
-Julia se dio cuenta de que muchos dicen lindo y hacen feísimo.
-Ernesto creía en los Reyes Magos hasta que vio a niños trabajar.
-Me di cuenta de que mi novio no tenía un gemelo sino que me engañaba.
De paso, una sugerencia: “Darse cuenta”, película de Alejandro Doria, con monumentales actuaciones de Luis Brandoni, Darío Grandinetti y China Zorrilla. Un fresco agobiante por hospitales públicos en la Argentina de los ochenta y por actitudes que ante un moribundo pueden tener hermanos, cuñados, médicos y enfermeras.
Algunos eligen creen pese a lo que ven. Otros optan por el pesimismo, una de cuyas rimas es facilismo.
La obra cuenta con silencios densos, de los que se pueden padecer en la vida cotidiana y por los que cabe agradecer en el cine. Y para que la música no se extrañe, una versión del tema “La Maza” para el elogio, el pensamiento y el tarareo.
-Me di cuenta de que mi amiga no trabaja de relacionista pública sino de… ustedes sabrán entender.
-Si el ratón Pérez dejara monedas por cada diente que se lleva, el viejo de la esquina sería millonario.
-Julia se dio cuenta de que muchos dicen lindo y hacen feísimo.
-Ernesto creía en los Reyes Magos hasta que vio a niños trabajar.
-Me di cuenta de que mi novio no tenía un gemelo sino que me engañaba.
2/9/10
Entre Tinelli y alguien que se toma en serio las cosas
La consigna era escribir en media hora un texto a partir de esta frase: "Este país va a cambiar cuando la gente como Marcelo Tinelli desaparezca de la televisión, el día en que el prestigio no signifique fama sino trabajo duro para ayudar a que la sociedad crezca en valores".
Desde aquí y en función de conceptos como poder, discriminación, prestigio y el signficado que les atribuye la sociedad, Emilia Maisterrena, de segundo año del Colegio San Ignacio, produjo un material que ojalá sea leído por muchos, entre otros quienes sostienen que los chicos no piensan.
Coincido con la frase. Desafortunadamente, en nuestra sociedad la gente no aprecia valores. Consideran cuán rica y cuán famosa es la gente.
Marcelo Tinelli es muy famoso y rico. Tiene un programa despreciable en el cual bailan mujeres. Estas mujeres tienen muy buenas chances de vida, educación, pero eligen vender sus cuerpos en la televisión. Piensan que bailar semidesnudas les proveerá una buena vida. Se equivocan. La gente gusta de ellas porque son atractivas, no por su interior.
Showmatch, el programa de Marcelo Tinelli, cautiva a la gente con peleas y las chicas mencionadas. Tiene un rating muy alto. Tiene un montón de poder. Por todo esto es socialmente prestigioso aquí.
Esto es una suerte de discriminación. Los médicos, los maestros, gente que realmente ayuda a la sociedad a crecer, no son valorados como prestigiosos. Esto es muy injusto. Marcelo Tinelli tiene un programa con mujeres semidesnudas y los docentes forman a las personas. ¿Quién es más prestigioso? ¿Quién ayuda más en la sociedad?
En mi grupo de pares, muchos de nosotros vemos Showmatch. Sabiendo todas estas cosas todavía nos gusta. Estamos muy aburridos, preferimos ver televisión a dedicar tiempo a la escuela. Somos la causa del prestigio de Tinelli. Debemos cambiar nuestra manera de pensar y actuar. Tenemos que socializar.
Si nos lo proponemos, podemos cambiar. No es muy difícil.
Desde aquí y en función de conceptos como poder, discriminación, prestigio y el signficado que les atribuye la sociedad, Emilia Maisterrena, de segundo año del Colegio San Ignacio, produjo un material que ojalá sea leído por muchos, entre otros quienes sostienen que los chicos no piensan.
Coincido con la frase. Desafortunadamente, en nuestra sociedad la gente no aprecia valores. Consideran cuán rica y cuán famosa es la gente.
Marcelo Tinelli es muy famoso y rico. Tiene un programa despreciable en el cual bailan mujeres. Estas mujeres tienen muy buenas chances de vida, educación, pero eligen vender sus cuerpos en la televisión. Piensan que bailar semidesnudas les proveerá una buena vida. Se equivocan. La gente gusta de ellas porque son atractivas, no por su interior.
Showmatch, el programa de Marcelo Tinelli, cautiva a la gente con peleas y las chicas mencionadas. Tiene un rating muy alto. Tiene un montón de poder. Por todo esto es socialmente prestigioso aquí.
Esto es una suerte de discriminación. Los médicos, los maestros, gente que realmente ayuda a la sociedad a crecer, no son valorados como prestigiosos. Esto es muy injusto. Marcelo Tinelli tiene un programa con mujeres semidesnudas y los docentes forman a las personas. ¿Quién es más prestigioso? ¿Quién ayuda más en la sociedad?
En mi grupo de pares, muchos de nosotros vemos Showmatch. Sabiendo todas estas cosas todavía nos gusta. Estamos muy aburridos, preferimos ver televisión a dedicar tiempo a la escuela. Somos la causa del prestigio de Tinelli. Debemos cambiar nuestra manera de pensar y actuar. Tenemos que socializar.
Si nos lo proponemos, podemos cambiar. No es muy difícil.
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