10/3/09

Piloto automático

En "La cultura como praxis", Zygmunt Bauman considera que "la función de toda rutina es convertir en lujos prescindibles la reflexión, el escrutinio, la experimentación, la vigilancia y otros esfuerzos que exigen costos y tiempo".
Otros autores eligen atajos expresivos. Para ellos, la habituación restringe las opciones.
Palabras elegidas o descartadas, está claro que la rutina es equivalente a la sombra del pescador en el cuento de Oscar Wilde. Más de una vez nos la queremos sacar de encima, pero lleva tanto trabajo que cuando queremos acordar le empezamos a contar elementos positivos y llegamos bastante lejos en la enumeración.