Grupo de riesgo
Kevin Love es basquetbolista de la NBA. Campeón en Cleveland en 2016, eficaz tirador de triples y valioso defensor, quien ve su portentoso físico puede imaginárselo granítico, un David que le hace frente a cualquier Goliat.
Él mismo se encarga de aseverar que jugar en la estadounidense NBA, la mejor liga de básquet del mundo, no lo convierte en invulnerable.
En la publicación Players' Tribune, cuenta que durante un partido con Atlanta Hawks empezó a sentir que le faltaba el aire, a tal punto que tras un minuto solicitado por el entrenador en vez de regresar al campo enfiló al vestuario.
Le hicieron estudios y dieron bien. El problema no era físico; había sido un ataque de pánico.
Se decidió a compartir su dolorosa vivencia "en parte, por mí, pero mayormente porque la gente no habla suficientemente sobre salud mental. Y los hombres y los chicos son probablemente los más rezagados.
Lo sé por experiencia. Al crecer, te imaginas realmente rápido de cómo se supone que actúe un muchacho. Aprendes lo que entraña 'ser un hombre'. Es como un manual: 'Sé fuerte. No hables acerca de tus sentimientos. Arreglate por las tuyas'. Por lo tanto, por 29 años de mi vida, seguí ese manual".
Sus valiosas palabras colaboran a la educación de presentes y futuras generaciones. Y a entender una de las razones por las cuales los hombres tienen una expectativa de vida menor que las mujeres.