28/3/16

Dolores a elección
"Es preferible el dolor del sacrificio al dolor del remordimiento"
es una frase que solía usar Juan Manuel Guerra, legendario entrenador del fútbol de ascenso, para incentivar a sus futbolistas al esfuerzo.
La vida puede considerarse una persistente elección de esfuerzos. Un padre puede sufrir por dos noches sin dormir velando una enfermedad de su hijo o por pasarlas de fiesta sin parar. El Cura Brochero optó por el dolor casi continuo por los miles de kilómetros recorridos en mula a los que le hubieran llegado, de vez en cuando, al pensar en lo que no había hecho. Día a día, multitud de hombres padecen por rechazos amorosos mientras otros se angustian porque no hablan.
La lista es mucho más extensa. Dolores... ¿Cuáles son tus elegidos?


Fuentes: Sábado, historia del fútbol de ascenso y El beato cura Brochero. Más nuestro que el pan casero.






Falacias sobre la privacidad
Hay quienes confunden defensa de la privacidad con engaño. Son los que enseguida reclaman: "Si no me das tu clave de correo es porque andás de trampa" o "si no me mandás una foto plano general de tu casa es porque estás con alguien". Quizás las sospechas sean fundadas, pero no por eso deja de ser un desatino considerar deshonesto lo que se desea mantener en reserva. Si no, habría que pensar que todos quienes vivimos en casas con paredes de ladrillo lo hacemos para ocultar una cocina de droga, un cuartito para la trata de personas o quién sabe qué otra actividad delictiva.

Al lado
Están los que se aferran al derecho a la privacidad para justificar su indiferencia o miedo a la denuncia. De la vivienda de al lado provienen gritos, ruidos de cadenazos, botellas que se estrellan contra la pared, entre otros.
"Ah, yo pensé que grababan un radioteatro", es uno de los latiguillos que excusan al vecino, cómodamente echado en el sillón frente al televisor. "Cada hogar es un mundo", es otro de los pretextos por los que se busca hacer de la casa contigua una nación cuya soberanía por nada del mundo se quiere vulnerar.

Atribuciones
Supongamos que Mirna Lemans es la reina de la sutileza, que mantiene la elegancia en televisión hasta cuando come un pancho que chorrea mostaza. Imaginemos que ama ser vista al punto de saludar y ofrecer autógrafos a las cámaras de control de tránsito. Disfruta con la exposición.
¿Da derecho esto de fotografiarla subrepticiamente mientras se limpia las manos en el mantel tras mancharse la camisa con el chimichurri del choripán? No, claro que no.
¿Y si vive subiendo a Facebook imágenes de este tipo? Tampoco. Si no, cualquiera tendría derecho de robarle dinero a una persona y dárselo a un pobre si ha visto que por lo común ella lo donaba.

Evaluación

De un diálogo con estudiantes del Programa Educativo de Adultos Mayores surgió esta lectura: a menudo se mira sin ver el derecho a la privacidad y se juzga que se ataca la privacidad cuando se espía por una ventana, se roba una foto, se lee un diario ajeno. Ahora bien, ¿qué pasa cuando se esparce un rumor relativo a la intimidad de alguien? La conclusión fue que también eso es romper la privacidad. La buena noticia es que el diálogo hizo consciente lo que la lengua tantas veces ejecuta automáticamente.

22/3/16

Fútbol, delito de multitudes
Las sociedades tienen la facultad de correr los límites de la ciencia ficción. En un lugar donde la diversidad es norma resulta inverosímil la disputa de un partido de fútbol entre cascotazos, ataques con gas pimienta e hinchas de un solo equipo.
En un contexto en el cual la violencia se ha institucionalizado la postal no es fantástica sino cotidiana.
¿Qué nos pasó, Manfredi? -preguntó desolado Leopoldo, el ludópata encarnado por Alfredo Alcón en la serie Vulnerables, a uno de sus compañeros de póker, detenido por la acusación de un traidor que solía jugar con ellos a los naipes en el garito.
¿Qué nos pasó, Argentina? -cabe interrogar frente a la ya endémica intolerancia de nuestro fútbol.
Por estas horas, el plantel de Sarmiento vuelve a Junín llevando a cuestas no solamente la derrota ante Rosario Central que lo mantiene hundido en el descenso sino también el disgusto de haber sufrido la coerción de la barra brava, a la cual le respondió a los golpes.
El hecho registra antecedentes. En 1988, días antes de que venciera a Racing en la final de la Liguilla y clasificara así a la Copa Libertadores, hubo un ida y vuelta entre el plantel de San Lorenzo y barras del club que dejó al entonces entrenador Héctor Veira con intenso dolor en las costillas. En 1981, el núcleo rapaz de la hinchada de Boca entró en La Candela, donde concentraba el equipo, y a punta de pistola pidió la obtención del campeonato Metropolitano. En 1993, semanas después de la coronación xeneize por el Apertura de 1992, un barrabrava de River le lanzó al técnico Daniel Passarella un puñal que por centímetros no se le clavó en la cabeza. ¿Supuesto motivo? No aportar dinero para la manutención de los malvivientes.
En 2013, un hincha de Racing es hallado muerto en la pileta de la subsede del club en Villa del Parque, ciudad de Buenos Aires. Su deceso no fue por causas naturales.
En 2014, en el predio de Villa Dominico, aparecen perros muertos colgados, en un macabro gesto de disconformidad de la barra de Independiente ante el rendimiento de los futbolistas durante el torneo que El Rojo pasó en el Nacional B.
El traidor en Vulnerables no era el único culpable de que las partidas de póker se hubieran transformado en un toma y daca con dinero de por medio, así como los barras no son los responsables monopólicos de la violencia en el principal deporte argentino.
Repasar hechos como los precitados de los cinco grandes conllevaría una nota inacabable. A otros países, tamaña lista les luce apenas menos creíble que los hechos de la película "Star Wars". A nosotros, futboleros argentinos, nos resta esperar la próxima crónica futbolístico policial.

Fuentes: revista El Gráfico, diarios La Nación y Olé.

21/3/16

Control social implacable
Es un simplismo sostener que una persona obra por lo que otras dicen. También lo es afirmar que las críticas, el chisme, las miradas de soslayo, los silencios repentinos cuando uno llega no hacen mella alguna.
En la serie "Niños robados" (basada en hechos reales, disponible en Youtube), Ricardo decide que comprará un bebé para su esposa que no puede quedar embarazada. "No aguanto más", "llevamos años oyendo esos comentarios", se justifica ante Elisa, su mujer, que también sufre los comentarios mordaces de la familia que los condena por no ser padres.
"Hay formas de hacerlo sin que nadie se entere", agrega Ricardo, al tanto del accionar tenebroso de sor Eulalia, quien estragó vidas desde sus hábitos junto al doctor Mena, que de médico tenía el guardapolvo.
Optar por una ilegalidad de las fuleras, la de participar del tráfico de bebés, con tal de no soportar un día a día arduo es lo que resolvieron Ricardo y Elisa.
Sin llegar al delito, otros hombres y mujeres decidieron en contra de sí mismos y de terceros y se casaron pese a no amarse, no fuera cuestión de quedar bajo sospecha de homosexualidad.
Sociedades, mandatos, juicios, condenas...


9/3/16

Dichoso saludo
El viejo Harvey Lipschultz daba clases por inercia; reconocía públicamente que había perdido las ganas cansado de burocracia y afectado por sus propias negligencias. La formidable serie "Boston public", relativa a un secundario estadounidense, también lo mostró recibiendo cálidos saludos de exalumnos, quizás de los que lo habían tenido antes de su declinación. Ese día, Lipschultz se quedó después de hora en el aula corrigiendo con ganas.
"Hay gente necesaria", dice Hamlet Lima Quintana. Como esos exalumnos y otros que caminan por Río Cuarto. Están "a la vuelta de la esquina", accesibles al salir del ensimismamiento.

8/3/16

Prensa, otro femenino que sufre
Basta la coerción del intendente de un pequeño pueblo para que una nota al candidato opositor sea censurada. La novela "Los ricos no piden permiso" expone una realidad. La escena puede no incluir matones rentados por el poder ejecutivo sino un llamado telefónico al dueño del diario para que despida al periodista, la cancelación del apoyo publicitario al medio u otros mecanismos para la disuasión.
La libertad de prensa, como el día de la mujer, es una hermosa idea rodeada de espinas.

1/3/16

Al oscuro
Mil millones de personas viven sin acceso a la energía eléctrica. El dato suministrado por "Gates notes", publicación de Bill y Melinda Gates, lleva a pensar que, si estás leyendo esto, es sumamente probable que no seas uno de los postergados.
De hecho, es difícil que un seguidor de este blog viva en Africa subsahariana o sea uno de los 300 millones de seres humanos que en la India pasan sus días sin que sus dedos opriman botones y llaves para prender computadoras, lámparas, tubos fluorescentes, levanten la tapa de un freezer, abran la heladera, etc.
Ni televisión por cable, ni lavarropas automático, ni secarropas, ni horno microondas, ni grill, ni aire acondicionado, ni...
Parte de la vida consiste en prepararse para aceptar el no. Para adaptarse a los ni. Claro que esa parte de la vida parece ser pequeña para tu y yo y muy grande para los mil millones que no necesitan andar de boliche en boliche para vivir casi siempre de noche.
"Tanta luz para nuestras habitaciones y tanta oscuridad en algunas decisiones", pensó Adrián Ramírez, que recordaba algunas elecciones francamente desatinadas.