"Es preferible el dolor del sacrificio al dolor del remordimiento" es una frase que solía usar Juan Manuel Guerra, legendario entrenador del fútbol de ascenso, para incentivar a sus futbolistas al esfuerzo.
La vida puede considerarse una persistente elección de esfuerzos. Un padre puede sufrir por dos noches sin dormir velando una enfermedad de su hijo o por pasarlas de fiesta sin parar. El Cura Brochero optó por el dolor casi continuo por los miles de kilómetros recorridos en mula a los que le hubieran llegado, de vez en cuando, al pensar en lo que no había hecho. Día a día, multitud de hombres padecen por rechazos amorosos mientras otros se angustian porque no hablan.
La lista es mucho más extensa. Dolores... ¿Cuáles son tus elegidos?
Fuentes: Sábado, historia del fútbol de ascenso y El beato cura Brochero. Más nuestro que el pan casero.