22/2/11

Reflexiones, recuerdos, relatos

Fabián González continúa escribiendo. En prosa y en verso, entrega materiales para la evocación, la agudeza, la autocrítica y la sensibilización.

Nativo
“Hay una mirada, escarcha en sus ojos, que atribula a mi corazón:
La calcárea defensa que ellos imponen no cesa, me piden que me vaya, que no los hiera… yo para ellos soy y no soy un extraño…porque en mis ojos confunde el ansia de conquista, que vieron “los antiguos” en el viejo hombre blanco: y esa mirada da miedo y da muerte, con el olvido y la pólvora, la indiferencia y el espanto.
El vuelo de su alma va dejando un rastro de sangre, mezclada con barro y con selva, con monte y Luna, y se escapa al filo de la noche, entre pesadillas ancestrales que se repiten incansables…
Ayer fue exterminado, hoy es marginado, pero siempre es él, su estirpe, la que sufre el vacío de las tierras y recursos, el desgarrador lamento de su madre Naturaleza…
Y se muere en silencio en el impenetrable Chaco, llora al lado del río en el Sur codiciado, ahoga su grito en medio de la soledad, en el vasto desierto, en la llanura, en el prado.
Y ESE QUE SE MUERE EN REPOSADA Y SECRETA AGONÍA, ESE ES NUESTRO NATIVO.”



Corazones

“Corazón de terciopelo,
amores de medio pelo
ensimismados
y cabrones,
perversos y aniñados…”

“Corazón de porcelana, juventud
baladí y lozana,
fulgores en la nieve,
en las mejillas rosadas,
ruborizadas por el calor de un encuentro…”

“Corazón de papel,
bohemio y soñador,
abrevado por la pluma de los besos y poemas,
la sangre en tinta
de amores trágicos y montaraces…”

“Corazones que se cuecen,
a las llamas de un amor,
al calor de las miradas,
ensopados en caricias,
ensalzados por los besos…”


Precipicios

"Los precipicios sólo existen en la letanía de la mente, cuando cansada, no quiere dar ese gran salto hacia la verdad que tanto anhela..."


Una golondrina

“En mis ojos una golondrina
es la última imagen de tu adiós,
cerca del otoño de tu amor… “

“Con su vuelo muere mi ilusión
y en el aire, las últimas palabras
que mi boca pronunció, aún enamorados.”

“Cae de a poco la noche
y tus ojos son un broche,
prendido al corazón”

“Es escarcha mi mirada,
retraída en la distancia…
en el gris de tu ausencia descarnada”