3/9/16

Deplorable, Charlie Hebdo
¿Corresponde reírse de cualquier tema? La pregunta es retórica, para algunos huelga responderla con un "No" y para otros, entre ellos los hacedores de la revista Charlie Hebdo, se contesta indudablemente diciendo "Sí".
En nombre de la libertad de expresión, humillan credos distintos y refieren a los muertos y heridos del terremoto en Italia como "fideos con salsa" y "lasaña" para aludir a las personas atrapadas entre paredes venidas abajo. Y como si la enunciación de una supuesta verdad limpiara sus culpas agregan: "No fue Charlie Hebdo sino la mafia la que construyó sus casas". En síntesis: no se quejen de la burla atroz, apunten su malestar a quienes edificaron precariamente.
El argumento es canalla y estúpido. Avala, por ejemplo, reírse de alguien a quien le robaron con la premisa: "No te enojes conmigo pues no soy el ladrón".
Demasiado cinismo para revestirlo de libertad de expresión. ¿Esta misma gente habría reído si alguien hubiera satirizado el salvaje atentado de un comando de ISIS que costó la vida de varios trabajadores de Charlie Hebdo? ¿Hubieran celebrado un texto que se mofara de su profundo dolor? ¿Habrían festejado la ocurrencia de alguien de comparar sus muertos con un plato de pastas?
¿Para esto es la libertad? Otra pregunta retórica.