12/6/09

Algunos días

Vacaciones soñadas
Y los días pasaron. Fue cuestión de olvidar sueños que no habrían de cumplirse y de asumir que había alrededores desconocidos.
Hubo que cambiar el rumbo. Como al cabo de cualquier viaje, descansar fue una necesidad. Dormir sí, quedarse dormido no.
Se impuso pensar en lo que vendría sin urgencia ni pereza, lo que requiere un equilibrio ideal -¿con i de imposible?
Finalmente, empezaron las vacaciones en el río después de un día en la laguna y de varios meses planeando el viaje al mar.

Final timbrado
Cuatro veces fueron a la puerta con la misma cantinela.
Cuatro veces se quedaron sin respuesta.
Un censo no puede empezar a las 8 de la mañana.
Y los siguientes intentos no corresponden a la hora de la siesta.

Autodidacta
“De cada partido quedan enseñanzas”, escribió en la hoja de lo que tendría que asumir.
“No siempre aplico las enseñanzas”, en la hoja de lo que asumía a su pesar.
“Tengo que saber que no todo es quiero o no quiero”, en la hoja de lo que a su ánimo le convenía asimilar.
“No toda mentira es mala”, en la hoja de lo que requería ser un buen jugador de truco.