27/6/11

La hermosura dijo presente
“Comer, rezar, amar” es una película generosa

Lo que sigue es un tramo de un correo electrónico que le envía tras visitar ruinas en Italia el personaje de Julia Roberts a David, novio con el que rompe. Si alguien cree que el resto de la obra es igual de bien concebida está en lo cierto. No apta para los que desconfían de finales felices, sí para quienes disfrutan de paisajes geográficos y culturales a ambos lados del meridiano de Greenwich.

Todos queremos que las cosas sigan igual, conformarnos con ser infelices por miedo al cambio, a un derrumbe. Miré este lugar, todo el caos que ha sufrido, cómo ha sido adaptado, quemado, saqueado y reconstruido, y me sentí reconfortada. Quizás mi vida no haya sido tan caótica, pero el mundo lo es y la trampa es encariñarse con una parte de él. La ruina es un regalo. La ruina es el camino a la transformación”.