Sordera colectiva
"No me gusta el joropo", dijo Claudia. "Yo tengo un amigo parecido y tampoco me gusta", replicó Analía mientras Elías pensaba ¿por qué se meten con mi peinado?
En el mismo colectivo que sale de la universidad a las 18.20 se escuchaban estas frases, no todas confusiones:
"Me molesta menos el 2 que la sonrisa de García al firmarme la libreta. ¡Qué prostituto!". "¿Gol de Instituto? ¿No jugó ayer?".
"Llego a casa y paso directo a la cama". "Si querés, te ayudo a destenderla". "Qué bueno, la gente se ofrece ayuda, ¿viste que hay jóvenes solidarios?". "Odio a los veterinarios, nunca dejan de hablar de sus materias. ¿Para qué traer al ómnibus la lombriz solitaria? Me tienen harto". "¡Otro más! ¿Hasta cuándo me van a decir bagarto?".
"No me gusta el joropo", dijo Claudia. "Yo tengo un amigo parecido y tampoco me gusta", replicó Analía mientras Elías pensaba ¿por qué se meten con mi peinado?
En el mismo colectivo que sale de la universidad a las 18.20 se escuchaban estas frases, no todas confusiones:
"Me molesta menos el 2 que la sonrisa de García al firmarme la libreta. ¡Qué prostituto!". "¿Gol de Instituto? ¿No jugó ayer?".
"Llego a casa y paso directo a la cama". "Si querés, te ayudo a destenderla". "Qué bueno, la gente se ofrece ayuda, ¿viste que hay jóvenes solidarios?". "Odio a los veterinarios, nunca dejan de hablar de sus materias. ¿Para qué traer al ómnibus la lombriz solitaria? Me tienen harto". "¡Otro más! ¿Hasta cuándo me van a decir bagarto?".