20/4/13

Vacío argumental
"El que se enoja, no sirve para jugar al fútbol"
, sentenció el futbolista Juan Román Riquelme. Fue una manera de justificar los empujones e insultos que cruzaron el sufrido arquero Agustión Orión y Emiliano Albín, defensor que no defiende.
Fiel a su estilo, Riquelme no pudo solamente decir su verdad; también necesitó hacer sentir mal al periodista que le hizo la pregunta.
A Boca le convendría que esta aptitud del 10 para el ataque se notara en la cancha.

Y en cuanto a los argumentos, es evidente que le está errando, tanto como casi siempre que intenta embocar un tiro al arco: sin andar enojado, Pancho Sa ganó seis veces la Copa Libertadores.