Escenarios vitales
"Para hablar de una persona hay que conocerla", expresa Lidia Olmedo. Considera que antes de decir si es buena o no conviene contemplar "si es educada, solidaria, trabajadora, honesta, de buen carácter".A cuento de valores, piensa en la tolerancia y la ejemplifica así: "Dos personas discuten de un tema sin ponerse de acuerdo, pero una termina dándole la razón al otro para evitar una situación desagradable. Es una forma de demostrar respeto y no llegar a los extremos".
Otro principio es la fortaleza o "capacidad moral para sobrellevar sufrimientos o penalidades". Un ejemplo que propone Lidia es el de "una mujer que queda sola, con hijos pequeños a los que hay que alimentar, vestir, llevar al colegio. Es de imaginar que tiene que pasar por muchas cosas, ni qué pensar cuando se enferman".
El colofón es "la perseverancia", que para esta entusiasta lectora y tallerista del PEAM entraña "constancia en la manera de ser u obrar". Apunta Lidia que "a veces empezamos una tarea que nos da mucho trabajo y la dejamos a medio hacer. Pero a todo lo que uno se proponga le tiene que dedicar tiempo y perseverar. Se puede aplicar al estudio, al trabajo, a la superación de algunas adicciones como al cigarrillo, al alcohol, al juego. Es cuestión de proponérselo y no perder la fe. Hay cosas que parecen imposibles y exigen que uno ponga todo de sí para hacer cierto aquello de 'persevera y triunfarás".