Palabras a la par de hechos
Entre la gente necesaria a la que le escribe Hamlet Lima
Quintana está la figura de san Francisco de Asís. Blanca Nieves Molina
lo estima cual "gran religioso" fundador de la orden que con el tiempo
pasó a llevar su nombre. "Lideró un movimiento de renovación cristiana",
agrega y señala que "es por eso que tuvo un gran eco entre las clases
populares su figura y es valorada mas allá de sus propias creencias".
"Lo que hay que admirar de san Francisco de Asis es el gran amor a Dios y
los pobres, por quienes tenía un profundo sentimiento", expresa Blanca.
Desea que se expanda por doquier "ese amor" en lugar de "tanta vanidad".
El hombre que hizo del cambio un sinónimo de perfeccionamiento y pasó
de una vida licenciosa a vivir austeramente y entregar sus posesiones
a los pobres dejó una huella indeleble.
Con sus actos le dio vida cotidiana a su oración:
Oh, Señor, hazme un instrumento de tu paz .
Donde haya odio, ponga yo amor.
Donde haya ofensa, perdón.
Donde haya discordia, unión.
Donde haya error, verdad.
Donde haya duda, fe.
Donde haya desesperación, esperanza.
Donde haya tinieblas, luz.
Donde haya tristeza, alegría
Oh, Maestro, haz que yo no busque tanto ser consolado como consolar,
ser comprendido como comprender,
ser amado como amar.
Porque
dando se recibe,
olvidando se encuentra
perdonando se es perdonado,
muriendo se resucita a la vida eterna.
Fuente de la oración: https://solidaridad.net/oraciones-de-san-francisco962/