Mugrosa tradición
Una arraigada costumbre es la de culpar a los
otros. Cuando se trata de la nación, el chivo emisario suele ser la
clase política.
Ahora bien, ¿qué tiene que ver un dirigente con el
festejo por la graduación de alguien que consiste en esparcir mugre en
una plaza?
Los habitantes que asocian celebración con enchastre de
la vía pública, ¿ejercen la ciudadanía como es debido? No parecen pensar
en los demás; asumen que los placeros tienen no la obligación de mantener la limpieza sino también la de eliminar la suciedad provocada por... gente grande en circunstancias evitables.
Por supuesto, en acciones así no se pone en juego el acceso a créditos
internacionales ni la transparencia electoral, pero no deja de ser un
mensaje de desconsideración por lo que es de todos, de indiferencia, de
tradición poco generosa con el esfuerzo ajeno.
Un blog variopinto, con textos ligados a pensamientos, sensaciones, descripciones, narraciones, sentimientos, ocurrencias y reflexiones sobre temas periodísticos sin correr tras primicias. Miradas acerca de lo que nos pasa, lo que nos gustaría, lo que perdimos y lo que soñamos.
20/12/16
13/12/16
Bellezas del archivo
Distante utilidad
Hugo Alves afirmó en 1982, meses después de su transferencia a Barcelona, que Maradona seguía siendo clave para Boca. Refería a las cuotas que por su pase llegaban al xeneize y se destinaban al pago de sueldos del plantel.
Un año antes, otro hombre que no jugaba en Boca pero había pertenecido y volvería al equipo, también resultaba esencial para el club. Sin lugar entre los delanteros boquenses, Ricardo Gareca fue a préstamo a Sarmiento de Junín durante el Metropolitano de 1981. Dos de sus goles, reseña El Gráfico del 19 de mayo, tuvieron lugar en Caballito y transformaron la derrota 2-0 ante Ferro en empate.
Tres meses después, Boca se coronó campeón con un punto de ventaja sobre Ferro.
Ángel ofuscado
"Los periodistas son coimeros y los dirigentes son peores todavía" fue un exabrupto de Ángel Labruna el 5 de marzo de 1981, año en cuyo 3 de mayo en una conferencia de prensa le espetó a un periodista: "A usted no lo quiero ni ver. Me ha traicionado entrevistando a miembros de la oposición". Los reseñados por Gustavo Béliz en la edición 3215 de El Gráfico no fueron los únicos enojos del entonces entrenador de River. Antes de 1981 había bramado: "Ya voy a hablar con el demente de (Oscar) Ortiz", hábil puntero derecho de conflictiva relación con Norberto Alonso y Reinaldo Merlo, hijos dilectos de Labruna.
Más allá de lo registrado por la gran revista del deporte argentino, un audio que solía pasar Alejandro Apo ilustraba que Labruna enfadado pintaba en blanco y negro, jamás con grises. Respecto de hinchas millonarios que silbaban a sus propios jugadores, sostenía que podía esperar actitudes así de "los de afuera; los de afuera son enemigos, enemigos de la bandera, del club. Pero los de adentro no".
Fue el máximo goleador de River en la historia del club y del superclásico con Boca, se coronó 9 veces campeón como futbolista -fuente: Wikipedia- y seis como técnico de la Banda Roja (Metro y Nacional 1975, Metro '77, Metro y Nacional '79, Metro de 1980).
Distante utilidad
Hugo Alves afirmó en 1982, meses después de su transferencia a Barcelona, que Maradona seguía siendo clave para Boca. Refería a las cuotas que por su pase llegaban al xeneize y se destinaban al pago de sueldos del plantel.
Un año antes, otro hombre que no jugaba en Boca pero había pertenecido y volvería al equipo, también resultaba esencial para el club. Sin lugar entre los delanteros boquenses, Ricardo Gareca fue a préstamo a Sarmiento de Junín durante el Metropolitano de 1981. Dos de sus goles, reseña El Gráfico del 19 de mayo, tuvieron lugar en Caballito y transformaron la derrota 2-0 ante Ferro en empate.
Tres meses después, Boca se coronó campeón con un punto de ventaja sobre Ferro.
Ángel ofuscado
"Los periodistas son coimeros y los dirigentes son peores todavía" fue un exabrupto de Ángel Labruna el 5 de marzo de 1981, año en cuyo 3 de mayo en una conferencia de prensa le espetó a un periodista: "A usted no lo quiero ni ver. Me ha traicionado entrevistando a miembros de la oposición". Los reseñados por Gustavo Béliz en la edición 3215 de El Gráfico no fueron los únicos enojos del entonces entrenador de River. Antes de 1981 había bramado: "Ya voy a hablar con el demente de (Oscar) Ortiz", hábil puntero derecho de conflictiva relación con Norberto Alonso y Reinaldo Merlo, hijos dilectos de Labruna.
Más allá de lo registrado por la gran revista del deporte argentino, un audio que solía pasar Alejandro Apo ilustraba que Labruna enfadado pintaba en blanco y negro, jamás con grises. Respecto de hinchas millonarios que silbaban a sus propios jugadores, sostenía que podía esperar actitudes así de "los de afuera; los de afuera son enemigos, enemigos de la bandera, del club. Pero los de adentro no".
Fue el máximo goleador de River en la historia del club y del superclásico con Boca, se coronó 9 veces campeón como futbolista -fuente: Wikipedia- y seis como técnico de la Banda Roja (Metro y Nacional 1975, Metro '77, Metro y Nacional '79, Metro de 1980).
6/12/16
Costo de vida
Errar es tan humano como tomar buenas decisiones sobre las vidas ajenas.
Un piloto tiene que elegir en segundos qué hacer tras un hecho inédito: una bandada de palomas le choca el avión y le rompe los dos motores.
Acuatizar en el río Hudson requiere aptitud y coraje. Rescatar a las 155 personas que terminaron el vuelo en de pie sobre las alas que flotan en el agua, en botes inflables o dentro del agua a apenas 2 grados demanda coordinación y rapidez. Con 20 grados bajo cero, el invierno no da tiempo.
Los ciudadanos de a pie lo aman. Sin embargo, Sully debe rendir cuentas a empresarios que no le perdonan haber salvado vidas a un alto costo económico.
Los simuladores de vuelo indican que el piloto podría haber vuelto al aeropuerto de La Guardia o aterrizado en otro cercano. Sully asegura que era imposible. El diario del lunes, o la crítica de hinchas o periodistas sobre hechos futbolísticos consumados, también existe en la aviación. Desde la tribuna, un palco o una oficina y con mucho más tiempo se sabe siempre qué tendría que haber hecho el otro... en un contexto crucial.
"Sully" es de esas películas que, basadas en hechos reales, expone con belleza medallas y miserias humanas. La dirige Clint Eastwood y la protagoniza Tom Hanks, por lo que no sorprende la semejanza lograda entre el actor y el canoso piloto de blancos bigotes que debió rendir en el aire un examen terrible que no fue el último de su vida.
Errar es tan humano como tomar buenas decisiones sobre las vidas ajenas.
Un piloto tiene que elegir en segundos qué hacer tras un hecho inédito: una bandada de palomas le choca el avión y le rompe los dos motores.
Acuatizar en el río Hudson requiere aptitud y coraje. Rescatar a las 155 personas que terminaron el vuelo en de pie sobre las alas que flotan en el agua, en botes inflables o dentro del agua a apenas 2 grados demanda coordinación y rapidez. Con 20 grados bajo cero, el invierno no da tiempo.
Los ciudadanos de a pie lo aman. Sin embargo, Sully debe rendir cuentas a empresarios que no le perdonan haber salvado vidas a un alto costo económico.
Los simuladores de vuelo indican que el piloto podría haber vuelto al aeropuerto de La Guardia o aterrizado en otro cercano. Sully asegura que era imposible. El diario del lunes, o la crítica de hinchas o periodistas sobre hechos futbolísticos consumados, también existe en la aviación. Desde la tribuna, un palco o una oficina y con mucho más tiempo se sabe siempre qué tendría que haber hecho el otro... en un contexto crucial.
"Sully" es de esas películas que, basadas en hechos reales, expone con belleza medallas y miserias humanas. La dirige Clint Eastwood y la protagoniza Tom Hanks, por lo que no sorprende la semejanza lograda entre el actor y el canoso piloto de blancos bigotes que debió rendir en el aire un examen terrible que no fue el último de su vida.
29/11/16
"Mozo, café francés"
Lugares donde se dialoga, espacios en los que se bebe, reductos para comer lo que en casa está prohibido. Según cómo los presenten y las imágenes que los receptores elijan construir, los cafés suponen ámbitos convocantes, indistintos, especiales, de pérdida de tiempo, de aprendizaje.
Hombres y mujeres de un taller de lengua francesa del Programa Educativo de Adultos Mayores de la Universidad Nacional de Río Cuarto tomaron cafés parisinos para estudiar y enseñar. Tras semanas de investigación, dieron vida a una hora de textos, imágenes y canciones coordinados por la profesora Silvia Elstein.
Los parroquianos, agradecidos. No solo porque la vuelta fue gratis sino porque se enteraron de pensamientos valiosos, evocaron artistas extranjeros y conocieron a los de acá nomás.
Hubo imágenes de "Medianoche en París" y sonrisas, de Alain Delon y suspiros duraderos, voces de Edith Piaf y de Carlos Miguez, alumno del taller de Francés que aportó música en vivo. El café del PEAM fue el contexto en el que se habló de sus pares famosos de París, tales como Le Procop y el célebre de la Paix, y de sus habitués, entre ellos Marat, Balzac, Benjamin Franklin, Diderot, Emile Zola, Bertold Brecht, James Joyce.
Uno de los escritores que se hizo presente, cuándo no, con el pensamiento fue Jean Jacques Rousseau, de quien alguien citó: "El hombre es libre, pero en todos lados está encadenado".
Los adultos mayores locales presentaron un desfile de reflexiones e invitaciones que hicieron famosos que se sentaron en cafés de París. En francés oral y español escrito en powerpoint, pasaron el convite de Ernesto Sábato para crear belleza en un mundo bárbaro y hostil, la certeza firmada por Joyce de que "las acciones de los hombres son las mejores intérpretes de sus pensamientos", aparte el diagnóstico de Guy de Maupassant: "Cuando estamos solos mucho tiempo poblamos nuestro espíritu de fantasmas".
Cafés de los dos Molinos, La Rotonde, Le Dome de Flore y más. Un recorrido por sus arquitecturas y clientes tuvo una bella contraparte en el barcito del PEAM, de cuyas paredes colgaban pinturas y dibujos hechos por alumnos de talleres varios como los motivos: arboledas, montañas, templos, casas, retratos, flores, canoas, en tonos pastel, colores vivos y blanco y negro.
Mientras las mozas ofrecían otra vuelta, una alumna recordó la distinción de Coco Chanel: "No es la apariencia, es la esencia; no es el dinero, es la educación; no es la ropa, es la clase".
Minutos después, la canción "Milord" expuso lo bien que queda un silencio largo si antes y después se oye la voz del Gorrión de París.
La indagación de los alumnos del taller de Francés incluyó remedios caseros. Como el champagne con el cual curó su gripe Luis Buñuel, según su propio testimonio.
La operación técnica de la profesora Silvia Elstein, que se las arregló para coordinar textos de estudiantes con imágenes de su cosecha, contempló rostros tan dispares como los de Salvador Dalí y Brigitte Bardot.
Las voces de los adultos mayores que buscaron afuera también sonaron desde sus adentros. Así, Susana Caminal propuso mirar "al futuro con optimismo y alegría", Norma Di Cola preguntó: "¿Has tenido alguna vez la maravillosa sensación de dejar la piel en el intento?", Paulino Ferreyra confió haber "aprendido que la verdadera felicidad es la paz contigo mismo", Mercedes Nuñez pidió valorar "a quien te dedica tiempo: te está dando algo que nunca recuperará". Como éstas, varias otras piezas de las que aprender entre alfajores, conitos de dulce de leche y cortados.
Lugares donde se dialoga, espacios en los que se bebe, reductos para comer lo que en casa está prohibido. Según cómo los presenten y las imágenes que los receptores elijan construir, los cafés suponen ámbitos convocantes, indistintos, especiales, de pérdida de tiempo, de aprendizaje.
Hombres y mujeres de un taller de lengua francesa del Programa Educativo de Adultos Mayores de la Universidad Nacional de Río Cuarto tomaron cafés parisinos para estudiar y enseñar. Tras semanas de investigación, dieron vida a una hora de textos, imágenes y canciones coordinados por la profesora Silvia Elstein.
Los parroquianos, agradecidos. No solo porque la vuelta fue gratis sino porque se enteraron de pensamientos valiosos, evocaron artistas extranjeros y conocieron a los de acá nomás.
Hubo imágenes de "Medianoche en París" y sonrisas, de Alain Delon y suspiros duraderos, voces de Edith Piaf y de Carlos Miguez, alumno del taller de Francés que aportó música en vivo. El café del PEAM fue el contexto en el que se habló de sus pares famosos de París, tales como Le Procop y el célebre de la Paix, y de sus habitués, entre ellos Marat, Balzac, Benjamin Franklin, Diderot, Emile Zola, Bertold Brecht, James Joyce.
Uno de los escritores que se hizo presente, cuándo no, con el pensamiento fue Jean Jacques Rousseau, de quien alguien citó: "El hombre es libre, pero en todos lados está encadenado".
Los adultos mayores locales presentaron un desfile de reflexiones e invitaciones que hicieron famosos que se sentaron en cafés de París. En francés oral y español escrito en powerpoint, pasaron el convite de Ernesto Sábato para crear belleza en un mundo bárbaro y hostil, la certeza firmada por Joyce de que "las acciones de los hombres son las mejores intérpretes de sus pensamientos", aparte el diagnóstico de Guy de Maupassant: "Cuando estamos solos mucho tiempo poblamos nuestro espíritu de fantasmas".
Cafés de los dos Molinos, La Rotonde, Le Dome de Flore y más. Un recorrido por sus arquitecturas y clientes tuvo una bella contraparte en el barcito del PEAM, de cuyas paredes colgaban pinturas y dibujos hechos por alumnos de talleres varios como los motivos: arboledas, montañas, templos, casas, retratos, flores, canoas, en tonos pastel, colores vivos y blanco y negro.
Mientras las mozas ofrecían otra vuelta, una alumna recordó la distinción de Coco Chanel: "No es la apariencia, es la esencia; no es el dinero, es la educación; no es la ropa, es la clase".
Minutos después, la canción "Milord" expuso lo bien que queda un silencio largo si antes y después se oye la voz del Gorrión de París.
La indagación de los alumnos del taller de Francés incluyó remedios caseros. Como el champagne con el cual curó su gripe Luis Buñuel, según su propio testimonio.
La operación técnica de la profesora Silvia Elstein, que se las arregló para coordinar textos de estudiantes con imágenes de su cosecha, contempló rostros tan dispares como los de Salvador Dalí y Brigitte Bardot.
Las voces de los adultos mayores que buscaron afuera también sonaron desde sus adentros. Así, Susana Caminal propuso mirar "al futuro con optimismo y alegría", Norma Di Cola preguntó: "¿Has tenido alguna vez la maravillosa sensación de dejar la piel en el intento?", Paulino Ferreyra confió haber "aprendido que la verdadera felicidad es la paz contigo mismo", Mercedes Nuñez pidió valorar "a quien te dedica tiempo: te está dando algo que nunca recuperará". Como éstas, varias otras piezas de las que aprender entre alfajores, conitos de dulce de leche y cortados.
24/11/16
Calor y otras molestias
Olvidaste que la vida es lucha, por eso te mando esta época del año, cuando la sobreprotección y la comodidad lleva a padres a reclamar aprobación, no aprendizaje, para sus hijos.
La contagiosa adolescencia y el crédito dado solo a uno de los protagonistas de la clase los lleva a creer que un dos es injusto sin molestarse en leer el examen.
El "tolerantismo", término que sabiamente pronuncia Pedro Barcia, contamina las aguas. Se acepta cualquier flaqueza, incluida la negligencia, y se considera autoritaria la justicia.
No importa que digas que actuás como el escribano que da fe, en tu caso del saber ajeno; es muy probable que te rotulen de subjetivo, inequitativo, y encima te enrostren la rima.
Como sé que sos débil y te acordás bien del técnico que los sacó campeones hace un montón de años, además de "veinte latigazos" te voy a dar "un chupetín": tené presente que aun entre espinas hay pétalos y que sigue valiendo la pena dedicarte al jardín. Dejá el cemento para las calles.
Nota al pie: Juan Carlos Lorenzo era el técnico que postulaba para sus equipos la lógica de "un chupetín cada veinte latigazos". Sobre la base de esfuerzos (triple turno de trabajo de pretemporadas cuando nadie lo hacía) coronó a Boca bicampeón local en 1976, de la Libertadores en 1977 y 1978 y del Mundo en 1978.
Olvidaste que la vida es lucha, por eso te mando esta época del año, cuando la sobreprotección y la comodidad lleva a padres a reclamar aprobación, no aprendizaje, para sus hijos.
La contagiosa adolescencia y el crédito dado solo a uno de los protagonistas de la clase los lleva a creer que un dos es injusto sin molestarse en leer el examen.
El "tolerantismo", término que sabiamente pronuncia Pedro Barcia, contamina las aguas. Se acepta cualquier flaqueza, incluida la negligencia, y se considera autoritaria la justicia.
No importa que digas que actuás como el escribano que da fe, en tu caso del saber ajeno; es muy probable que te rotulen de subjetivo, inequitativo, y encima te enrostren la rima.
Como sé que sos débil y te acordás bien del técnico que los sacó campeones hace un montón de años, además de "veinte latigazos" te voy a dar "un chupetín": tené presente que aun entre espinas hay pétalos y que sigue valiendo la pena dedicarte al jardín. Dejá el cemento para las calles.
Nota al pie: Juan Carlos Lorenzo era el técnico que postulaba para sus equipos la lógica de "un chupetín cada veinte latigazos". Sobre la base de esfuerzos (triple turno de trabajo de pretemporadas cuando nadie lo hacía) coronó a Boca bicampeón local en 1976, de la Libertadores en 1977 y 1978 y del Mundo en 1978.
18/11/16
Piojos resucitados
La semana le dio la razón a aquello de que el fútbol es muestra de una sociedad. La afirmación hace agua, aunque no por todos lados.
Uno de los casos en los que sí rige la idea fue el de la selección nacional.
De capa caída por el apabullante 3-0 sufrido ante Brasil, los futbolistas afrontaron el partido siguiente cabizbajos y leyeron por twitter la acusación: uno de ellos habría fumado marihuana mientras estaba de servicio, concentrado a la espera del choque con Colombia.
Bastó una victoria por 3-0 para que el equipo tomara la corporativa medida de no hablar más con la prensa.
Después se quejan del exitismo y de cómo una victoria nubla juicios de valor.
Semana de máscaras caídas
El boxeador Fabio Moli, otrora personaje en Show Match, dio nuevas
muestras de su primitivismo al defender las carreras de galgos y
violentarse contra Marcelo Tinelli, cuya hija Candelaria se opone a esta
competencia en la que los perros alimentan a sus amos.
Los futbolistas de la selección argentina deciden fuera de la cancha parecido a como lo hacen dentro. Dado que Gabriel Anello, conductor del programa Súper Mitre Deportivo, acusó a uno de ellos de fumar marihuana, ellos resolvieron que no habrá más declaraciones al periodismo.
¿Cómo se sentiría Lionel Messi, vocero de la determinación, si a él no volvieran a convocarlo simplemente por compartir profesión y equipo con jugadores deficitarios en la selección?
Sancionar a todos y no solo al presunto culpable es injusto y estereotipa. Con otras formas, el mismo primitivismo de La Mole Moli.
Los futbolistas de la selección argentina deciden fuera de la cancha parecido a como lo hacen dentro. Dado que Gabriel Anello, conductor del programa Súper Mitre Deportivo, acusó a uno de ellos de fumar marihuana, ellos resolvieron que no habrá más declaraciones al periodismo.
¿Cómo se sentiría Lionel Messi, vocero de la determinación, si a él no volvieran a convocarlo simplemente por compartir profesión y equipo con jugadores deficitarios en la selección?
Sancionar a todos y no solo al presunto culpable es injusto y estereotipa. Con otras formas, el mismo primitivismo de La Mole Moli.
15/11/16
Caída
Por Jonatan Bento, estudiante del IPEM 252 (hecho en quince minutos de clase)
El pequeño duende se sentía solo, una noche, salió a caminar
por el bosque y cayó en una fosa muy profunda. La caída se hacia
interminable, mientras caía se dijo: "¡Cuan maravillosa es esta fosa, si
parece el abismo de un corazón roto a causa de un desamor.La
agonía es interminable".Y luego recordó a su amigo que dias antes le
dijo: "No te confíes en lo aparente sino en lo consecuente". Y se dijo
"creo que no debí salir por la noche, sobre todo no debí tomar este
camino, pero soy imperfecto como dijo aquel sabio del nogal".
9/11/16
Mil pasiones
Bajás del tren. Suena cumbia. Te parece escuchar la voz de Gilda. No importa si no es, alcanza con que la imagines. Recordás la fiesta entre los escalones y el alambrado la tarde aquella del gol de Cacho Pereyra, cuando la gramilla fue zona de saltos de mercerdarios cuyas remeras se agitaban en sus manos un festivo sábado de 1991, cuando el cuarto año del Industrial equivalía casi, casi a dolce far niente. . Seguís caminando y te acompañan partidos que acentuaron o quebraron rachas: saliste dichoso tras 23 partidos sin triunfos, volviste triste por una derrota sobre la hora contra Olimpo, gritaste un golazo de Bustamante de tiro libre para empatar en el último minuto o el éxtasis por el de Leo Colombo, en la agonía de un partido ajeno, por la última fecha, que te sirvió para zafar del descenso.
Caminaste de un lado a otro mientras Esteban Fuertes se aprestaba a patear un penal contra Quilmes, lo admiraste a Gilmar Villagrán, chiquito como El Chapulín Colorado, gigante en su actitud y aptitud para ponerse el equipo al hombro y buscar la igualdad.
Le creíste a un viejo sabio que, tras escuchar los resultados por la voz del estadio, sentenció: "Central Córdoba no se va", pese a que su promedio de puntos era de los más bajos. Te abrazaste con un flor de hincha cerca del codo de las plateas, a pasos de un pibe que lloraba -no eran gotas de lluvia las de sus pómulos- ahora de felicidad por el gol de Diego Latorre de media vuelta contra Independiente para que Boca ganara 2-1 y Boca alcanzara a Ñuls en la punta del Clausura '92.
Acevedo, esquina del Banco Nación, peatonal, plaza donde antes estaba la cancha, casa de rejas con duendes albirrojos en el jardín.
La memoria te guía y el reloj sugiere prisa. Marcos Brítez Ojeda remata seco y es 1-0 en el tercer minuto de descuento; victoria clave y festejo al sol. Pelotazos, búsqueda infructuosa pero defensa sólida, un 0-0 que no dice mucho salvo que uno sea hincha y sepa que el empate, también con Platense, deja atrás tres derrotas al hilo, la misma temporada en la cual concluyó 2012 con un 1-1 frente a Morón y al sol, que pegó duro aún de 6 a 7 de la tarde en la tribuna Palacios, donde tu amigo Pablo te avisó que el delantero ligero de ellos era Ramón Wanchope Ábila.
Garona, Estrada, Santa Fe. La boletería está más cerca. Como cuando palpitabas para entrar mientras del otro lado de la tribuna ya se oía "Ay ay ay ay/ qué risa que me da/ si no gana Los Andes/ qué quilombo se va' armar". Imborrable tarde del sábado 17 de junio de 1995, cuando el 5-0 a All Boys marcó un hito ya que Los Andes seguía siendo Nacional en una remontada épica en una temporada que iniciamos con seis derrotas consecutivas.
Estás pagando la popular.
Gilda ya no suena en los puestos de venta ambulante de la pasarela en la estación de tren de Lomas de Zamora. La música de "Se me ha perdido un corazón" resuena alrededor y tu felicidad crece a medida que subís los escalones. La cancha de Los Andes, la de Alberdi, la de Boca: distintos lugares, variadas épocas y muy parecidas pasiones se te hicieron presente en un viaje por algunas de tus sensacionales alegrías.
Bajás del tren. Suena cumbia. Te parece escuchar la voz de Gilda. No importa si no es, alcanza con que la imagines. Recordás la fiesta entre los escalones y el alambrado la tarde aquella del gol de Cacho Pereyra, cuando la gramilla fue zona de saltos de mercerdarios cuyas remeras se agitaban en sus manos un festivo sábado de 1991, cuando el cuarto año del Industrial equivalía casi, casi a dolce far niente. . Seguís caminando y te acompañan partidos que acentuaron o quebraron rachas: saliste dichoso tras 23 partidos sin triunfos, volviste triste por una derrota sobre la hora contra Olimpo, gritaste un golazo de Bustamante de tiro libre para empatar en el último minuto o el éxtasis por el de Leo Colombo, en la agonía de un partido ajeno, por la última fecha, que te sirvió para zafar del descenso.
Caminaste de un lado a otro mientras Esteban Fuertes se aprestaba a patear un penal contra Quilmes, lo admiraste a Gilmar Villagrán, chiquito como El Chapulín Colorado, gigante en su actitud y aptitud para ponerse el equipo al hombro y buscar la igualdad.
Le creíste a un viejo sabio que, tras escuchar los resultados por la voz del estadio, sentenció: "Central Córdoba no se va", pese a que su promedio de puntos era de los más bajos. Te abrazaste con un flor de hincha cerca del codo de las plateas, a pasos de un pibe que lloraba -no eran gotas de lluvia las de sus pómulos- ahora de felicidad por el gol de Diego Latorre de media vuelta contra Independiente para que Boca ganara 2-1 y Boca alcanzara a Ñuls en la punta del Clausura '92.
Acevedo, esquina del Banco Nación, peatonal, plaza donde antes estaba la cancha, casa de rejas con duendes albirrojos en el jardín.
La memoria te guía y el reloj sugiere prisa. Marcos Brítez Ojeda remata seco y es 1-0 en el tercer minuto de descuento; victoria clave y festejo al sol. Pelotazos, búsqueda infructuosa pero defensa sólida, un 0-0 que no dice mucho salvo que uno sea hincha y sepa que el empate, también con Platense, deja atrás tres derrotas al hilo, la misma temporada en la cual concluyó 2012 con un 1-1 frente a Morón y al sol, que pegó duro aún de 6 a 7 de la tarde en la tribuna Palacios, donde tu amigo Pablo te avisó que el delantero ligero de ellos era Ramón Wanchope Ábila.
Garona, Estrada, Santa Fe. La boletería está más cerca. Como cuando palpitabas para entrar mientras del otro lado de la tribuna ya se oía "Ay ay ay ay/ qué risa que me da/ si no gana Los Andes/ qué quilombo se va' armar". Imborrable tarde del sábado 17 de junio de 1995, cuando el 5-0 a All Boys marcó un hito ya que Los Andes seguía siendo Nacional en una remontada épica en una temporada que iniciamos con seis derrotas consecutivas.
Estás pagando la popular.
Gilda ya no suena en los puestos de venta ambulante de la pasarela en la estación de tren de Lomas de Zamora. La música de "Se me ha perdido un corazón" resuena alrededor y tu felicidad crece a medida que subís los escalones. La cancha de Los Andes, la de Alberdi, la de Boca: distintos lugares, variadas épocas y muy parecidas pasiones se te hicieron presente en un viaje por algunas de tus sensacionales alegrías.
16/10/16
Bella Gilda
Un mafioso se queda con el 95 por ciento de los ingresos de una cantante. Un marido afirma amar a su mujer, si bien le desestima su vocación artística y cuando le sugiere un descanso en el jardín de infantes donde trabaja es para que se ocupe de sus hijos y sus plantas. "Gilda, no me arrepiento de este amor" ilustra lo que era para una mujer de los '90 salir de su casa en la Argentina y cuán limitado fue el alcance de la asamblea del año 1813.
Por eso las miradas frustradas, pletóricas de dicha y apagadas de Gilda en el tugurio del explotador que rige la bailanta, sobre el escenario y en su hogar. De yapa: su madre bien podría ser confundida con su suegra, tal el tono de sus comentarios.
La película expone crudamente los inicios entre indiferencia y desconfianza de diez, quince personas que no se entusiasman con una mujer flaquita que sabe afinar en tiempos en los que bailanta implicaba cuerpos -a quién le importaban las voces- como los de Lía Crucet y Gladys la bomba tucumana.
El marido de Gilda, lejos de acompañarla a cruzar pasillos oscuros y angostos, va cada tanto a espiarla, como si ella necesitara que le aumentaran la inseguridad.
Aparte la historia, impactan la caracterización y la actuación. Natalia Oreiro convence en su rol de Gilda como lo hiciera en el papel de montonera en Infancia clandestina. Javier Drolas (Toti Giménez) la acompaña cual maestro bailantero que le pide no alargar vocales porque "esto es cumbia" y le propone cantar con todo el cuerpo, lejos de la estatua paralizada por el miedo del casting.
Arresto domiciliario
¿Vos sabés lo que dicen mis padres, mis amigos?", le reprocha su esposo a Gilda por cantar en la bailanta, uno de los varios ambientes donde hacer evidente la destreza para la tarea central no importa tanto como mostrar lindas piernas.
Antes de ponerse comprensivamente en sus zapatos, justo es decir que el hombre era capaz de morar en la vivienda con su esposa sin por ello conocerla ni respetarla en su vocación.
Como tantos, buscaba y encontraba razones para sujetar a Gilda en la casa, actitud en la que perseveró.
La fuerza del agua
Todavía se explica el anegamiento de la calle Rioja diciendo que por ahí circulaba el río Cuarto, capaz de perseverar contra planos y edificaciones de años después.
"Gilda, no me arrepiento de este amor" muestra a una niña que encuentra en su papá músico a un modelo de rol. Así como en Los Fabulosos Baker Boys un día los hermanos abren una botella recibida años antes, la maestra jardinera cuyos proyectos de originalidad sabotea su madre y su sonrisa vulnera su marido abre un estuche y vuelve a tocar la guitarra de su padre.
Entonces, la vocación y su vida coinciden. Los efectos son parecidos a los de las inundaciones en la calle Rioja.
Un mafioso se queda con el 95 por ciento de los ingresos de una cantante. Un marido afirma amar a su mujer, si bien le desestima su vocación artística y cuando le sugiere un descanso en el jardín de infantes donde trabaja es para que se ocupe de sus hijos y sus plantas. "Gilda, no me arrepiento de este amor" ilustra lo que era para una mujer de los '90 salir de su casa en la Argentina y cuán limitado fue el alcance de la asamblea del año 1813.
Por eso las miradas frustradas, pletóricas de dicha y apagadas de Gilda en el tugurio del explotador que rige la bailanta, sobre el escenario y en su hogar. De yapa: su madre bien podría ser confundida con su suegra, tal el tono de sus comentarios.
La película expone crudamente los inicios entre indiferencia y desconfianza de diez, quince personas que no se entusiasman con una mujer flaquita que sabe afinar en tiempos en los que bailanta implicaba cuerpos -a quién le importaban las voces- como los de Lía Crucet y Gladys la bomba tucumana.
El marido de Gilda, lejos de acompañarla a cruzar pasillos oscuros y angostos, va cada tanto a espiarla, como si ella necesitara que le aumentaran la inseguridad.
Aparte la historia, impactan la caracterización y la actuación. Natalia Oreiro convence en su rol de Gilda como lo hiciera en el papel de montonera en Infancia clandestina. Javier Drolas (Toti Giménez) la acompaña cual maestro bailantero que le pide no alargar vocales porque "esto es cumbia" y le propone cantar con todo el cuerpo, lejos de la estatua paralizada por el miedo del casting.
Arresto domiciliario
¿Vos sabés lo que dicen mis padres, mis amigos?", le reprocha su esposo a Gilda por cantar en la bailanta, uno de los varios ambientes donde hacer evidente la destreza para la tarea central no importa tanto como mostrar lindas piernas.
Antes de ponerse comprensivamente en sus zapatos, justo es decir que el hombre era capaz de morar en la vivienda con su esposa sin por ello conocerla ni respetarla en su vocación.
Como tantos, buscaba y encontraba razones para sujetar a Gilda en la casa, actitud en la que perseveró.
La fuerza del agua
Todavía se explica el anegamiento de la calle Rioja diciendo que por ahí circulaba el río Cuarto, capaz de perseverar contra planos y edificaciones de años después.
"Gilda, no me arrepiento de este amor" muestra a una niña que encuentra en su papá músico a un modelo de rol. Así como en Los Fabulosos Baker Boys un día los hermanos abren una botella recibida años antes, la maestra jardinera cuyos proyectos de originalidad sabotea su madre y su sonrisa vulnera su marido abre un estuche y vuelve a tocar la guitarra de su padre.
Entonces, la vocación y su vida coinciden. Los efectos son parecidos a los de las inundaciones en la calle Rioja.
3/10/16
Pensar es superfluo
Jaime Barylko sostiene en su libro "El miedo a los hijos" que a menudo, sin necesidad de guerra, se vive como soldado: se evita el discernimiento, se opta por acatar dictámenes.
Jorge Valdano coincide al plantear que hay futbolistas que procuran la aceptación del entrenador y desconsideran sus propios criterios.
Sobran ejemplos más allá de padres y jugadores. "Órdenes son órdenes" es una ley universal cuya desobediencia suele costar el desempleo, el desprestigio o el ostracismo.
"Duele ser distinto", decía el personaje de Sergio Renan que en la película "La tregua" encarnaba al homosexual amigo de uno de los hijos de Martín Santomé.
"Dejá de pensar", le ordena su marido a la profesora que, en "La historia oficial", decide indagar acerca de la identidad de la niña que un día le llegó a su casa y a la cual por años crió sin cuestionarse.
¿La libertad de expresión puede ser absoluta? La respuesta puede darse con un término de vieja existencia y reciente uso: si es así, entonces el bullying -sucesión de lesivas manifestaciones en detrimento de alguien- no tiene por qué ser sancionado; al cabo, es un ejercicio expresivo.
Con la libertad de expresión suele pasar lo que acontece con los denominados súperpoderes ejecutivos en algunas democracias. Lo que en una medida es saludable, en extremo se torna abusivo y, paradójicamente, monárquico.
Por doquier
Jaime Barylko sostiene en su libro "El miedo a los hijos" que a menudo, sin necesidad de guerra, se vive como soldado: se evita el discernimiento, se opta por acatar dictámenes.
Jorge Valdano coincide al plantear que hay futbolistas que procuran la aceptación del entrenador y desconsideran sus propios criterios.
Sobran ejemplos más allá de padres y jugadores. "Órdenes son órdenes" es una ley universal cuya desobediencia suele costar el desempleo, el desprestigio o el ostracismo.
"Duele ser distinto", decía el personaje de Sergio Renan que en la película "La tregua" encarnaba al homosexual amigo de uno de los hijos de Martín Santomé.
"Dejá de pensar", le ordena su marido a la profesora que, en "La historia oficial", decide indagar acerca de la identidad de la niña que un día le llegó a su casa y a la cual por años crió sin cuestionarse.
¿La libertad de expresión puede ser absoluta? La respuesta puede darse con un término de vieja existencia y reciente uso: si es así, entonces el bullying -sucesión de lesivas manifestaciones en detrimento de alguien- no tiene por qué ser sancionado; al cabo, es un ejercicio expresivo.
Con la libertad de expresión suele pasar lo que acontece con los denominados súperpoderes ejecutivos en algunas democracias. Lo que en una medida es saludable, en extremo se torna abusivo y, paradójicamente, monárquico.
Por doquier
¿Cuánto reflexiona quien detona una bomba en nombre de una divinidad? ¿Cuánto medita el que alimenta a su familia con chatarra televisiva nocturna y luego culpa a los docentes por los fracasos de su hijo?
En "El bueno, el malo y el feo", uno de los personajes afirma que quien dirige a una milicia debe tomar alcohol antes de decidir. Como frase de película de cowboys es genial. Como estrategia para la vida real...
A cuento de medios de difusión masiva, ¿es libertad de expresión mostrar sangre en el pavimento para referir a un accidente de tránsito? ¿Usar insultos en las columnas de opinión?
Libertad, atacado tesoro.
28/9/16
Infladores profesionales
"Lo que realmente ha mejorado hoy es la capacidad de inflar tecnologías que probablemente no aporten demasiado", dijo Robert Post, presidente de la Sociedad para la Historia de la Tecnología. Transcurría 1997 cuando esta expresión fue publicada por Clarín en una columna de Steve Loht titulada "Para progresos, el siglo XIX".
Se podría reemplazar tecnologías por otros sustantivos tales como acciones, anuncios, gestiones, promesas, y la frase conservaría sentido.
Loth distingue avances y mejoras. Sostiene que "hay una diferencia real entre lo que el negocio de la computación llama 'upgrade' -una mejora suficiente como para tratar de vender una nueva versión del mismo producto- y un auténtico avance tecnológico. La máquina de vapor, el automóvil, el teléfono y el microchip fueron avances. Una computadora personal más veloz o un nuevo browser para Internet es sólo una mejora".
Al margen de las divergencias que la posición pueda suscitar, viene bien para reflexionar más allá de las tecnologías. ¿Avanza o mejora el fútbol? ¿La música? ¿La alimentación? ¿La educación?
Disidencias al margen, debe haber pocas dudas de que los cuatro campos son víctimas de infladores profesionales, especialistas en convencer de que la ignorancia, bien vestida, es virtud.
"Lo que realmente ha mejorado hoy es la capacidad de inflar tecnologías que probablemente no aporten demasiado", dijo Robert Post, presidente de la Sociedad para la Historia de la Tecnología. Transcurría 1997 cuando esta expresión fue publicada por Clarín en una columna de Steve Loht titulada "Para progresos, el siglo XIX".
Se podría reemplazar tecnologías por otros sustantivos tales como acciones, anuncios, gestiones, promesas, y la frase conservaría sentido.
Loth distingue avances y mejoras. Sostiene que "hay una diferencia real entre lo que el negocio de la computación llama 'upgrade' -una mejora suficiente como para tratar de vender una nueva versión del mismo producto- y un auténtico avance tecnológico. La máquina de vapor, el automóvil, el teléfono y el microchip fueron avances. Una computadora personal más veloz o un nuevo browser para Internet es sólo una mejora".
Al margen de las divergencias que la posición pueda suscitar, viene bien para reflexionar más allá de las tecnologías. ¿Avanza o mejora el fútbol? ¿La música? ¿La alimentación? ¿La educación?
Disidencias al margen, debe haber pocas dudas de que los cuatro campos son víctimas de infladores profesionales, especialistas en convencer de que la ignorancia, bien vestida, es virtud.
26/9/16
Ciudadano ilustre: volver a la tierra marchita
Alguien escribe miserias y otros aspectos de su pueblo natal guiado por aquello de "al que le quepa el sayo, que se lo ponga". Con la ventaja de testimoniar del otro lado del Atlántico y no trabajar en relación de dependencia, el hombre dispara con belleza verdades que incomodan. Se anima a criticar quienes lo consagran Nobel de literatura en plena ceremonia de premiación.
Un intendente oportunista resuelve declararlo ciudadano ilustre, la vanidad hace el resto y entonces Daniel Mantovani regresa a Salas.
Como dijo una sabia mujer, se da cuenta de qué podría haber sido de su vida de quedarse allí. Los personajes son una galería que aterra.
La entrevista del canal de TV de Salas al Nobel de literatura está atravesada por la publicidad de un jugo; los virus mediáticos atacan tanto a las transmisiones de las grandes ciudades como las de los pueblitos.
El lugar está dominado por hombres millonarios de actitudes miserables, incapaces de asumir que sus cuadros lastiman al arte, de respetar a sus esposas o de aceptar que crecer en un campo no garantiza prosperar en otros.
La violencia rige y con ella, el miedo. Cualquiera se siente con derecho de exigirle al ciudadano ilustre que vaya a almorzar a su casa, de pedirle una silla de ruedas y de ofenderse si la respuesta es no. Basta un enojo del capanga para que las clases públicas se hagan cada vez menos concurridas.
La ignorancia mantiene su dictadura de décadas en Salas. Lo pasa bien quien -aguda observación de un adulto mayor- ha optado por vivir sin pensar, usando su voz para imitar a los chanchos y no para preguntar al menos por el nombre de un libro. Envejece amargamente la que cumplió el mandato y se casó con un hombre que no concibe la vida sin recurrentes visitas al prostíbulo que ni siquiera siente debe ocultarle a su mujer, su propiedad.
Se le requiere a un premio Nobel que integre el jurado de un concurso de pintura para prestigiarlo. Pero dado que "usted se va y yo tengo que seguir viviendo en el pueblo", el intendente le pide que renuncie a todo lo que sabe y vote como si fuera estúpido. Ojalá Salas fuera solo un pueblo de la muy buena película "Ciudadano ilustre"...
"Apátrida" es la agresión verbal de un matón de Salas contra el escritor Daniel Mantovani. Pasa con los necios: perciben las verdades como ataques y responden con injurias. Subidos al poder que suelen deparar la riqueza y la coerción, irrumpen por doquier pues sienten que de todo saben.
Sin moralina, "Ciudadano ilustre" expone de modo meridianamente claro las consecuencias de la soberbia.
Alguien escribe miserias y otros aspectos de su pueblo natal guiado por aquello de "al que le quepa el sayo, que se lo ponga". Con la ventaja de testimoniar del otro lado del Atlántico y no trabajar en relación de dependencia, el hombre dispara con belleza verdades que incomodan. Se anima a criticar quienes lo consagran Nobel de literatura en plena ceremonia de premiación.
Un intendente oportunista resuelve declararlo ciudadano ilustre, la vanidad hace el resto y entonces Daniel Mantovani regresa a Salas.
Como dijo una sabia mujer, se da cuenta de qué podría haber sido de su vida de quedarse allí. Los personajes son una galería que aterra.
La entrevista del canal de TV de Salas al Nobel de literatura está atravesada por la publicidad de un jugo; los virus mediáticos atacan tanto a las transmisiones de las grandes ciudades como las de los pueblitos.
El lugar está dominado por hombres millonarios de actitudes miserables, incapaces de asumir que sus cuadros lastiman al arte, de respetar a sus esposas o de aceptar que crecer en un campo no garantiza prosperar en otros.
La violencia rige y con ella, el miedo. Cualquiera se siente con derecho de exigirle al ciudadano ilustre que vaya a almorzar a su casa, de pedirle una silla de ruedas y de ofenderse si la respuesta es no. Basta un enojo del capanga para que las clases públicas se hagan cada vez menos concurridas.
La ignorancia mantiene su dictadura de décadas en Salas. Lo pasa bien quien -aguda observación de un adulto mayor- ha optado por vivir sin pensar, usando su voz para imitar a los chanchos y no para preguntar al menos por el nombre de un libro. Envejece amargamente la que cumplió el mandato y se casó con un hombre que no concibe la vida sin recurrentes visitas al prostíbulo que ni siquiera siente debe ocultarle a su mujer, su propiedad.
Se le requiere a un premio Nobel que integre el jurado de un concurso de pintura para prestigiarlo. Pero dado que "usted se va y yo tengo que seguir viviendo en el pueblo", el intendente le pide que renuncie a todo lo que sabe y vote como si fuera estúpido. Ojalá Salas fuera solo un pueblo de la muy buena película "Ciudadano ilustre"...
"Apátrida" es la agresión verbal de un matón de Salas contra el escritor Daniel Mantovani. Pasa con los necios: perciben las verdades como ataques y responden con injurias. Subidos al poder que suelen deparar la riqueza y la coerción, irrumpen por doquier pues sienten que de todo saben.
Sin moralina, "Ciudadano ilustre" expone de modo meridianamente claro las consecuencias de la soberbia.
15/9/16
Suelto sobre educación
Una de las asunciones más dolorosas en la vida de un docente es que no lo puede todo. Escucha relatos de experiencias exitosas, lee textos en los que teóricos de la educación dan clase con satisfacción garantizada, ve videos en los que de la resistencia al aprendizaje se cambia al amor al saber, trata de aplicarlos y fracasa.
Una de las asunciones más dolorosas en la vida de un docente es que no lo puede todo. Escucha relatos de experiencias exitosas, lee textos en los que teóricos de la educación dan clase con satisfacción garantizada, ve videos en los que de la resistencia al aprendizaje se cambia al amor al saber, trata de aplicarlos y fracasa.
Como en el personaje del tango “Uno”, el profesor “busca
lleno de esperanzas el camino que sus sueños prometieron a sus ansias” y se
topa con barreras infranqueables. Sí, infranqueables salvo para todopoderosos,
adjetivo que no cabe para seres humanos.
Conviene recordar un atributo humano, la libertad, para
mantenerse tenaz en el esfuerzo pese a los motivos para desanimarse. También
para tener presente que hay estudiantes que en uso de su libertad eligen no
comer del banquete que una buena clase propone, figura que solía utilizar Jimmy
Cappanera, exdirector del colegio San Ignacio.
Creer que por sublime, magistral, estupenda, excelsa,
deliciosa que sea una clase los estudiantes refractarios a su mensaje atenderán
cual candidatos a la bandera es olvidar una condición inherente a la docencia:
se trata de una interacción entre dos o más personas, por lo cual no le cabe en
todos los casos la regla de tres simple. No siempre al gran entusiasmo de uno
corresponde elevado interés del otro. Desde luego, es más estimulante alguien a
quien se lo nota vivaz, contento por ejercer un trabajo intelectual que quien
se duerme mientras habla o no está sentado sino echado en el asiento de su
escritorio. De todos modos, importa mucho tener presente que, como todo
mensaje, el de la docencia es situado y transita entre condicionamientos
contextuales, familiares y culturales.
¿Qué significado tiene la docencia en el hogar del niño o adolescente que va a la escuela? ¿Qué escucha el estudiante de los mayores a su cargo respecto de quienes están al frente de un curso?
En una sociedad signada por la violencia, ¿cuánto puede lograrse mediante un acuerdo escolar de convivencia? Por cierto, que exista como concepto del que se habla en la escuela ya es valioso. Ahora bien, ¿puede hacer milagros en un entorno donde la agresión es el modo de vincularse?
Por último, apenas una pregunta: ¿cuán a menudo llegan a la escuela los padres a agradecer y con qué frecuencia se apersonan en la escuela a quejarse de los docentes?
13/9/16
Grave confusión
"¡Arriba, arriba, arriba, arriba, arriba, arriba, arriba!", decía el conductor de una FM que pedía "ritmo".
Como bien lo marcó Gabriel Magnoli, el de los locutores que se atragantan con palabras es un mal extendido. Como tantas creencias falsas, provoca daños. Hablar a los gritos,de prisa y clausurando el silencio no es ritmo, sino falta de consideración.
Locutores como el del ejemplo solo tragan la comida, seguros de que detenerse a saborear es una pausa vana. Compran su decimoquinto celular en tres años para estar "bien arriba" (otro latiguillo insufrible) sin pensar si tiene sentido.
El asunto pasa por obrar sin un miserable punto aparte. Hacer rápido, no importa qué ni cómo. Visionario, en los 1980s Luca Prodan lo sintetizaba en "no sé lo que quiero, pero lo quiero ya".
El mal se esparce
La de los locutores que reclaman ritmo a costa del pensamiento es una especie que, lejos de extinguirse, crece.
Jorge Valdano afirma en su libro "Fútbol: el juego infinito" que como el juego "se está llenando de jugadores que, en su afán por ser intensos, se mueven a una velocidad por encima de la que pueden permitirse, el atentado contra la precisión es permanente". Por ello reclama empezar "a poner en duda la palabra 'intensidad' como sinónimo de eficia. Sería como pensar que un reloj es bueno porque avanza más deprisa que los demás"
"¡Arriba, arriba, arriba, arriba, arriba, arriba, arriba!", decía el conductor de una FM que pedía "ritmo".
Como bien lo marcó Gabriel Magnoli, el de los locutores que se atragantan con palabras es un mal extendido. Como tantas creencias falsas, provoca daños. Hablar a los gritos,de prisa y clausurando el silencio no es ritmo, sino falta de consideración.
Locutores como el del ejemplo solo tragan la comida, seguros de que detenerse a saborear es una pausa vana. Compran su decimoquinto celular en tres años para estar "bien arriba" (otro latiguillo insufrible) sin pensar si tiene sentido.
El asunto pasa por obrar sin un miserable punto aparte. Hacer rápido, no importa qué ni cómo. Visionario, en los 1980s Luca Prodan lo sintetizaba en "no sé lo que quiero, pero lo quiero ya".
El mal se esparce
La de los locutores que reclaman ritmo a costa del pensamiento es una especie que, lejos de extinguirse, crece.
Jorge Valdano afirma en su libro "Fútbol: el juego infinito" que como el juego "se está llenando de jugadores que, en su afán por ser intensos, se mueven a una velocidad por encima de la que pueden permitirse, el atentado contra la precisión es permanente". Por ello reclama empezar "a poner en duda la palabra 'intensidad' como sinónimo de eficia. Sería como pensar que un reloj es bueno porque avanza más deprisa que los demás"
9/9/16
Lucha muy despareja
En víspera del día del maestro importa especialmente recordar palabras de Pedro Barcia, quien en 2008 diagnosticaba en elcastellano.org "un empobrecimiento gradual de los comunicadores en el manejo de lo que era el esplendor y la riqueza del léxico que es muy penoso".
Ejemplos:
-¿Alguien se tomó la insalubre tarea de contar las veces que Marcelo Tinelli pronuncia "Señores" en cada Showmatch?
-¿La cantidad de ocasiones en que se repite la hora a falta de ideas en un programa de radio?
-¿La recurrencia con que Gabriel Anello, locutor de fútbol, afirma que inteligencia le sobra aunque no para evitar que conjugue mal y diga "si me escucharían bien, me entenderían?".
-Las faltas de ortografía de diarios de tirada nacional en sus sitios de Internet asustan. Baste con apuntar que "exhorbitante" es una delicadeza.
Lejos quedaron los tiempos durante los cuales "los diarios nos enseñaron a escribir y las radios a hablar".
Ha empeorado el panorama de cuando Barcia aseguraba que para numerosos "comunicadores de radio y televisión todo es 'fantástico', lo mismo un cuento de Borges que unas medias caladas".
En víspera del día del maestro importa especialmente recordar palabras de Pedro Barcia, quien en 2008 diagnosticaba en elcastellano.org "un empobrecimiento gradual de los comunicadores en el manejo de lo que era el esplendor y la riqueza del léxico que es muy penoso".
Ejemplos:
-¿Alguien se tomó la insalubre tarea de contar las veces que Marcelo Tinelli pronuncia "Señores" en cada Showmatch?
-¿La cantidad de ocasiones en que se repite la hora a falta de ideas en un programa de radio?
-¿La recurrencia con que Gabriel Anello, locutor de fútbol, afirma que inteligencia le sobra aunque no para evitar que conjugue mal y diga "si me escucharían bien, me entenderían?".
-Las faltas de ortografía de diarios de tirada nacional en sus sitios de Internet asustan. Baste con apuntar que "exhorbitante" es una delicadeza.
Lejos quedaron los tiempos durante los cuales "los diarios nos enseñaron a escribir y las radios a hablar".
Ha empeorado el panorama de cuando Barcia aseguraba que para numerosos "comunicadores de radio y televisión todo es 'fantástico', lo mismo un cuento de Borges que unas medias caladas".
¿Es superfluo un vocabulario amplio?
Lingüista y director de la Academia Argentina de Letras, entre otros trabajos que vaya si lo han ocupado, Pedro Barcia planteaba en 2008: "El que no tiene posibilidad de hablar con precisión no puede manifestar lo que quiere y es un ciudadano de segunda. No tiene derecho a la libertad de expresión, es cautivo de su propia discapacidad y limitación. Y eso -añadió- lo generamos entre la docencia y algunos medios".
Rápido de reflejos, un pelandrún replicaría que es falso lo que sostiene Barcia por cuanto si alguien usa la libertad de expresión para hacer programas y negocios es Tinelli, de modo que no es preciso más que un puñado de términos para ejercer la libertad y, además, ser ciudadano que viaja en primera.
El diálogo podría seguir con un aporte relativo a cómo usa Tinelli su derecho a decir y un agregado: en TV se habla con la boca y también mediante imágenes. Huelga acotar que se nota en algunos planos sexistas que quien es vulgar oralmente suele serlo en escala global. ¿Es éste un ejercicio noble de libertad?
Un rato después, cientos de miles de docentes deben tratar de llevar adelante su tarea, bien conceptuada como "contracultural" por Guillermo Jaim Etcheverry.
Lingüista y director de la Academia Argentina de Letras, entre otros trabajos que vaya si lo han ocupado, Pedro Barcia planteaba en 2008: "El que no tiene posibilidad de hablar con precisión no puede manifestar lo que quiere y es un ciudadano de segunda. No tiene derecho a la libertad de expresión, es cautivo de su propia discapacidad y limitación. Y eso -añadió- lo generamos entre la docencia y algunos medios".
Rápido de reflejos, un pelandrún replicaría que es falso lo que sostiene Barcia por cuanto si alguien usa la libertad de expresión para hacer programas y negocios es Tinelli, de modo que no es preciso más que un puñado de términos para ejercer la libertad y, además, ser ciudadano que viaja en primera.
El diálogo podría seguir con un aporte relativo a cómo usa Tinelli su derecho a decir y un agregado: en TV se habla con la boca y también mediante imágenes. Huelga acotar que se nota en algunos planos sexistas que quien es vulgar oralmente suele serlo en escala global. ¿Es éste un ejercicio noble de libertad?
Un rato después, cientos de miles de docentes deben tratar de llevar adelante su tarea, bien conceptuada como "contracultural" por Guillermo Jaim Etcheverry.
3/9/16
Deplorable, Charlie Hebdo
¿Corresponde
reírse de cualquier tema? La pregunta es retórica, para algunos huelga
responderla con un "No" y para otros, entre ellos los hacedores de la
revista Charlie Hebdo, se contesta indudablemente diciendo "Sí".
En
nombre de la libertad de expresión, humillan credos distintos y
refieren a los muertos y heridos del terremoto en Italia como "fideos
con salsa" y "lasaña" para aludir a las personas atrapadas entre paredes
venidas abajo. Y como si la enunciación de una supuesta verdad limpiara
sus culpas agregan: "No fue Charlie Hebdo sino la mafia la que
construyó sus casas". En síntesis: no se quejen de la burla atroz,
apunten su malestar a quienes edificaron precariamente.
El
argumento es canalla y estúpido. Avala, por ejemplo, reírse de alguien a
quien le robaron con la premisa: "No te enojes conmigo pues no soy el
ladrón".
Demasiado
cinismo para revestirlo de libertad de expresión. ¿Esta misma gente
habría reído si alguien hubiera satirizado el salvaje atentado de un
comando de ISIS que costó la vida de varios trabajadores de Charlie
Hebdo? ¿Hubieran celebrado un texto que se mofara de su profundo dolor?
¿Habrían festejado la ocurrencia de alguien de comparar sus muertos con
un plato de pastas?
¿Para esto es la libertad? Otra pregunta retórica.
30/8/16
Vestigios de gloria del diez
Se ofrece como asesor del técnico de la selección olímpica justo él, que no quería que nadie le sugiriese cómo hacer asados (por cierto, se le quemó el que intentó preparar en la Copa de Sudáfrica 2010). Consumada la eliminación en los Juegos Olímpicos, criticó la conducción del entrenador Julio Olarticoechea, compañero suyo como futbolista en tres mundiales. Y eso que el Vasco nada dijo cuando los fracasos de Maradona frente a los planteles de Mandiyú y Racing, por no hablar del histórico 1-6 padecido por Argentina ante Bolivia con Diego como entrenador.
Olvidar todo lo que hizo Diego Armando Maradona como futbolista es una herejía. Pasar por alto su colección de desatinos es una complicidad acaso derivada del miedo a la libertad de expresión que lucha entre la tenaz intolerancia de los fanáticos.
Se ofrece como asesor del técnico de la selección olímpica justo él, que no quería que nadie le sugiriese cómo hacer asados (por cierto, se le quemó el que intentó preparar en la Copa de Sudáfrica 2010). Consumada la eliminación en los Juegos Olímpicos, criticó la conducción del entrenador Julio Olarticoechea, compañero suyo como futbolista en tres mundiales. Y eso que el Vasco nada dijo cuando los fracasos de Maradona frente a los planteles de Mandiyú y Racing, por no hablar del histórico 1-6 padecido por Argentina ante Bolivia con Diego como entrenador.
Olvidar todo lo que hizo Diego Armando Maradona como futbolista es una herejía. Pasar por alto su colección de desatinos es una complicidad acaso derivada del miedo a la libertad de expresión que lucha entre la tenaz intolerancia de los fanáticos.
Maradona: patético viajante
Un hombre con el pasaporte vencido no puede salir del país. Es la normativa, pero como la atribución de sentido que hace Diego es distinta se trata de una maniobra del "traidor" Alejandro Granados, intendente de Ezeiza y mandamás de Tristán Suárez, otrora bien visto por Maradona. El diez también critica al presidente de la Nación: intuye que la prohibición a embarcar es una venganza de Macri por su adhesión a Cristina Fernández y recuerda que Mauricio es el continuador de una dinastía que "desde Franco" roba. Fiel a su prédica de odio sin fin, Maradona se ratifica "Cristinista hasta los huevos". Curiosas vueltas las que da este hombre que se cree con derecho a todo: no era así de afín a Cristina Kirchner cuando el voto "no positivo" de Julio Cobos, a quien felicitó horas después del decisivo giro del entonces vicepresidente de la Nación respecto de la circular 125.
Maradona ilustra lo lamentable de sumar años y restar sensatez. Envejecer sin madurar es posible. Gracias, Diego, por demostrarlo tan a menudo.
Un hombre con el pasaporte vencido no puede salir del país. Es la normativa, pero como la atribución de sentido que hace Diego es distinta se trata de una maniobra del "traidor" Alejandro Granados, intendente de Ezeiza y mandamás de Tristán Suárez, otrora bien visto por Maradona. El diez también critica al presidente de la Nación: intuye que la prohibición a embarcar es una venganza de Macri por su adhesión a Cristina Fernández y recuerda que Mauricio es el continuador de una dinastía que "desde Franco" roba. Fiel a su prédica de odio sin fin, Maradona se ratifica "Cristinista hasta los huevos". Curiosas vueltas las que da este hombre que se cree con derecho a todo: no era así de afín a Cristina Kirchner cuando el voto "no positivo" de Julio Cobos, a quien felicitó horas después del decisivo giro del entonces vicepresidente de la Nación respecto de la circular 125.
Maradona ilustra lo lamentable de sumar años y restar sensatez. Envejecer sin madurar es posible. Gracias, Diego, por demostrarlo tan a menudo.
21/8/16
Procesos
"A Diego (Maradona) le llevó dos meses adaptarse a primera". Lo dijo Adrián Domenech, compañero suyo en Argentinos Juniors.
La frase de la rica entrevista de Hugo Balassone en Radio La Red ilustra cuánto importa la paciencia para desarrollar procesos.
Enzo Francescoli, goleador del River campeón 1985/86, referente en la obtención de la Copa Libertadores 1996, necesitó para madurar de un año de adaptación -para colmo, 1983, cuando el equipo fue penúltimo, en parte afectado por largas huelgas de sus profesionales.
Martín Palermo pasó ocho partidos de sequía hasta empezar a meter goles en Boca. Luego se convirtió en el máximo anotador del club en su historia.
Antonio Alzamendi marcó el gol que le dio a River la Copa Intercontinental en 1986. Nada que ver con su producción cuatro años antes, en su primer ciclo en los millonarios.
Conviene no caer en la tentación de descontextualizar y criticar a quienes en la actualidad esperan menos. Nos rodean mensajes de texto que llegan mil veces más rápido que una carta expreso, nos acompaña como un cubierto más el control remoto, de manera que ya no hay que levantarse de la mesa para subir el volumen o cambiar de canal. El acceso de los niños a la información acorta el tiempo de vida del mito de la cigüena.
Peligro
El entorno exitista es un acelerador pisado a fondo en una zona poblada.
Un viejo sabio tiene grabada la imagen de plateístas del club que seguían los pasos de Jorge Almirón cuando era técnico de Independiente y lo insultaban desde el inicio mismo de cada partido. Se fue y en su siguiente experiencia, si bien desplazó del plantel a Fritzler, jugador referente de Lanús, no se topó con semejante resistencia.
Es cierto que lo ayudó haber ganado los tres primeros cotejos. Tanto como que la paciencia de hinchas y directivos de Lanús lo respaldó. Ocho meses después, dos campeonatos nacionales son la dulce recompensa.
"A Diego (Maradona) le llevó dos meses adaptarse a primera". Lo dijo Adrián Domenech, compañero suyo en Argentinos Juniors.
La frase de la rica entrevista de Hugo Balassone en Radio La Red ilustra cuánto importa la paciencia para desarrollar procesos.
Enzo Francescoli, goleador del River campeón 1985/86, referente en la obtención de la Copa Libertadores 1996, necesitó para madurar de un año de adaptación -para colmo, 1983, cuando el equipo fue penúltimo, en parte afectado por largas huelgas de sus profesionales.
Martín Palermo pasó ocho partidos de sequía hasta empezar a meter goles en Boca. Luego se convirtió en el máximo anotador del club en su historia.
Antonio Alzamendi marcó el gol que le dio a River la Copa Intercontinental en 1986. Nada que ver con su producción cuatro años antes, en su primer ciclo en los millonarios.
Conviene no caer en la tentación de descontextualizar y criticar a quienes en la actualidad esperan menos. Nos rodean mensajes de texto que llegan mil veces más rápido que una carta expreso, nos acompaña como un cubierto más el control remoto, de manera que ya no hay que levantarse de la mesa para subir el volumen o cambiar de canal. El acceso de los niños a la información acorta el tiempo de vida del mito de la cigüena.
Peligro
El entorno exitista es un acelerador pisado a fondo en una zona poblada.
Un viejo sabio tiene grabada la imagen de plateístas del club que seguían los pasos de Jorge Almirón cuando era técnico de Independiente y lo insultaban desde el inicio mismo de cada partido. Se fue y en su siguiente experiencia, si bien desplazó del plantel a Fritzler, jugador referente de Lanús, no se topó con semejante resistencia.
Es cierto que lo ayudó haber ganado los tres primeros cotejos. Tanto como que la paciencia de hinchas y directivos de Lanús lo respaldó. Ocho meses después, dos campeonatos nacionales son la dulce recompensa.
17/8/16
Honor a la grandeza
Apreciar atributos en la derrota se facilita cuando no se es fanático. Se respeta un liderazgo en el básquetbol que acaso en el fútbol que apasiona se reprocharía.
Emanuel Ginóbili vio a un compañero amagando ensuciar un partido virtualmente imposible de ganar y, lejos de sumársele, lo instó a dejar la bravata y perder con la frente en alto.
Un hombre que ha aunado talento, esfuerzo y caballerosidad jugó el 17 de agosto (¡vaya fecha!) de 2016 su último cotejo con la selección argentina de básquet. La película fue realista y justa: la Argentina cayó ante Estados Unidos, Ginóbili dijo adiós con los mejores de testigo: un final a su altura.
La mejor victoria
Emanuel Ginóbili estaba perdiendo. El exitismo, destructor de la razón, podría haberlo llevado a vender cara la derrota, a arruinar el festejo a Estados Unidos. Acostumbrado a las victorias (4 veces campéón en la NBA, oro olímpico en 2004, entre muchos otros títulos), aceptó irse de la selección argentina de básquet con un revés deportivo.
Su imagen del final, con abrazos de afecto y respeto de compañeros y rivales, es una postal de triunfo vital, perenne. Un deportista de elevado espíritu nos enseña a quienes trazamos gruesas y desprolijas rayas para distinguir vencedores y vencidos que la mano puede ser distinta. Y que hay premios más allá de las estadísticas.
Apreciar atributos en la derrota se facilita cuando no se es fanático. Se respeta un liderazgo en el básquetbol que acaso en el fútbol que apasiona se reprocharía.
Emanuel Ginóbili vio a un compañero amagando ensuciar un partido virtualmente imposible de ganar y, lejos de sumársele, lo instó a dejar la bravata y perder con la frente en alto.
Un hombre que ha aunado talento, esfuerzo y caballerosidad jugó el 17 de agosto (¡vaya fecha!) de 2016 su último cotejo con la selección argentina de básquet. La película fue realista y justa: la Argentina cayó ante Estados Unidos, Ginóbili dijo adiós con los mejores de testigo: un final a su altura.
La mejor victoria
Emanuel Ginóbili estaba perdiendo. El exitismo, destructor de la razón, podría haberlo llevado a vender cara la derrota, a arruinar el festejo a Estados Unidos. Acostumbrado a las victorias (4 veces campéón en la NBA, oro olímpico en 2004, entre muchos otros títulos), aceptó irse de la selección argentina de básquet con un revés deportivo.
Su imagen del final, con abrazos de afecto y respeto de compañeros y rivales, es una postal de triunfo vital, perenne. Un deportista de elevado espíritu nos enseña a quienes trazamos gruesas y desprolijas rayas para distinguir vencedores y vencidos que la mano puede ser distinta. Y que hay premios más allá de las estadísticas.
14/8/16
Memorable día del niño
Hay errores que nunca se olvidan. Para el día del niño de 1987, la iglesia Santa Rosa armó un torneo de fútbol a la misma hora en que Alberdi recibía a Estudiantes por un minicertamen clasificatorio al Interligas de Córdoba.
Adrián Ramírez optó por quedarse a jugar. Sus compañeros ocasionales no llegaban y se hacía la hora de empezar. Pasó a otro equipo y mientras avanzaba su encuentro fueron acercándose los atrasados, que le recriminaban haberse ido a otro bando.
Alberdi se lucía con lo que podía: garra y fervor. La multitud que llenó la cancha estaba satisfecha y vivió su fiesta peronista con la presencia de José Manuel de la Sota, cuyo agregado artificial de pelo se veía con nitidez desde el quinto escalón de la tribuna.
La celebración fue histórica pues Alberdi superó 1-0 a Estudiantes y fueron los pobres quienes no pidieron permiso esa vez para gozar.
Entretanto, el improvisado equipo de Adrián Ramírez perdía 2-0 y era eliminado del torneo infantil. El repunte alcanzó para igualar 2-2 y forzar la definición por penales. Fiel a su estadística anterior y posterior, Ramírez falló el suyo y minutos después trataba infructuosamente de despejar su amargura viendo la imitación que un integrante del grupo juvenil de la iglesia Santa Rosa hacía de Minguito en el club El Sol.
Al rato, en su casa, supo de la maravillosa tarde que hubiera vivido de haber ido con su padre a ver Alberdi- Estudiantes. Aprendió Ramírez que elegir y errar son verbos a menudo superpuestos.
Hay errores que nunca se olvidan. Para el día del niño de 1987, la iglesia Santa Rosa armó un torneo de fútbol a la misma hora en que Alberdi recibía a Estudiantes por un minicertamen clasificatorio al Interligas de Córdoba.
Adrián Ramírez optó por quedarse a jugar. Sus compañeros ocasionales no llegaban y se hacía la hora de empezar. Pasó a otro equipo y mientras avanzaba su encuentro fueron acercándose los atrasados, que le recriminaban haberse ido a otro bando.
Alberdi se lucía con lo que podía: garra y fervor. La multitud que llenó la cancha estaba satisfecha y vivió su fiesta peronista con la presencia de José Manuel de la Sota, cuyo agregado artificial de pelo se veía con nitidez desde el quinto escalón de la tribuna.
La celebración fue histórica pues Alberdi superó 1-0 a Estudiantes y fueron los pobres quienes no pidieron permiso esa vez para gozar.
Entretanto, el improvisado equipo de Adrián Ramírez perdía 2-0 y era eliminado del torneo infantil. El repunte alcanzó para igualar 2-2 y forzar la definición por penales. Fiel a su estadística anterior y posterior, Ramírez falló el suyo y minutos después trataba infructuosamente de despejar su amargura viendo la imitación que un integrante del grupo juvenil de la iglesia Santa Rosa hacía de Minguito en el club El Sol.
Al rato, en su casa, supo de la maravillosa tarde que hubiera vivido de haber ido con su padre a ver Alberdi- Estudiantes. Aprendió Ramírez que elegir y errar son verbos a menudo superpuestos.
8/8/16
Después de rendir
No se oía nada. Había que esperar. Se suponía que estaban hablando, pero ni siquiera un murmullo se sentía. Sucede cuando son muchos más los que aguardan un resultado que los que deben darlo.
"Pasá, por favor", dijo Delia mientras su cara adelantaba el pesar por una mala nota. Era una profesora estándar, o sea que no se complacía en entregar un 2 en la libreta. Alfredo, su compañero de cátedra, le dio a Adrián Ramírez los fundamentos.
Hubo dos apretones de manos y sonrisas casi rectas, cortas, de tristeza ante el que sufre más.
"En setiembre se rinde de nuevo, dale con fe", le dijo Julieta y Adrián sintió un hermoso breve alivio.
No se oía nada. Había que esperar. Se suponía que estaban hablando, pero ni siquiera un murmullo se sentía. Sucede cuando son muchos más los que aguardan un resultado que los que deben darlo.
"Pasá, por favor", dijo Delia mientras su cara adelantaba el pesar por una mala nota. Era una profesora estándar, o sea que no se complacía en entregar un 2 en la libreta. Alfredo, su compañero de cátedra, le dio a Adrián Ramírez los fundamentos.
Hubo dos apretones de manos y sonrisas casi rectas, cortas, de tristeza ante el que sufre más.
"En setiembre se rinde de nuevo, dale con fe", le dijo Julieta y Adrián sintió un hermoso breve alivio.
7/8/16
Los guapos del comité
La justicia ha vuelto a ser burlada. Los atletas paralímpicos rusos no podrán participar a consecuencia de la sanción del comité organizador por el "corrupto" sistema de su país, no de ellos, según aseveró Philip Craven.
Rusia es una nación grande, aunque no tanto como para tener dos sistemas de preparación, de modo que si la organización de los Juegos Paralímpicos la excluye de la competencia por su deshonestidad ligada a personas con alguna discapacidad, cabe preguntar por qué no hizo lo mismo con los otros atletas rusos.
La respuesta, triste, se cae de maduro: al chivo expiatorio se lo elige pues se lo considera débil, capaz de soportar golpes sin devolverlos. Además, el dinero en juego de los paralímpicos es notoriamente menor que el de los olímpicos.
Quedate tranquila, FIFA, no eres la única multinacional deportiva que causa vergüenza ajena.
La justicia ha vuelto a ser burlada. Los atletas paralímpicos rusos no podrán participar a consecuencia de la sanción del comité organizador por el "corrupto" sistema de su país, no de ellos, según aseveró Philip Craven.
Rusia es una nación grande, aunque no tanto como para tener dos sistemas de preparación, de modo que si la organización de los Juegos Paralímpicos la excluye de la competencia por su deshonestidad ligada a personas con alguna discapacidad, cabe preguntar por qué no hizo lo mismo con los otros atletas rusos.
La respuesta, triste, se cae de maduro: al chivo expiatorio se lo elige pues se lo considera débil, capaz de soportar golpes sin devolverlos. Además, el dinero en juego de los paralímpicos es notoriamente menor que el de los olímpicos.
Quedate tranquila, FIFA, no eres la única multinacional deportiva que causa vergüenza ajena.
31/7/16
No tan distintos
"Cuando perdíamos nos encerraban en una jaula", contó una yudoca a la BBC, en un documental sobre refugiados que participan en los Juegos Olímpicos Río 2016. No fue por esto sino por una guerra que emigró del Congo ni es la suya la única historia dolorosa. Una atleta de Serbia que pasó 25 días viajando en un bote de goma lleno de gente señaló que debió llegar nadando a las costas griegas, en las que fue recibida al grito de "date vuelta y andate".
Es fácil suponer que crueldades así no se ejecutan por acá. Sin embargo, el exitismo o enfermedad en la cual la falta de triunfos deriva en juicios errados pasea cada vez que se juega fútbol. Ese deporte en el cual, de tanto celebrar "lo que pásó la última vez" que una hinchada corrió violentamente a otra, en los estadios no hay distintos.
Geraldo, el entrenador de yudo, reveló que necesitó inculcarles a los atormentados congoleños que perder una lucha no tenía consecuencias terribles como terminar enjaulado.
A la adolescente serbia no fue menester enseñarle que al llegar a la meta no habría repudio sino satisfacción.
En el fútbol argentino, ¿quién nos educará?
"Cuando perdíamos nos encerraban en una jaula", contó una yudoca a la BBC, en un documental sobre refugiados que participan en los Juegos Olímpicos Río 2016. No fue por esto sino por una guerra que emigró del Congo ni es la suya la única historia dolorosa. Una atleta de Serbia que pasó 25 días viajando en un bote de goma lleno de gente señaló que debió llegar nadando a las costas griegas, en las que fue recibida al grito de "date vuelta y andate".
Es fácil suponer que crueldades así no se ejecutan por acá. Sin embargo, el exitismo o enfermedad en la cual la falta de triunfos deriva en juicios errados pasea cada vez que se juega fútbol. Ese deporte en el cual, de tanto celebrar "lo que pásó la última vez" que una hinchada corrió violentamente a otra, en los estadios no hay distintos.
Geraldo, el entrenador de yudo, reveló que necesitó inculcarles a los atormentados congoleños que perder una lucha no tenía consecuencias terribles como terminar enjaulado.
A la adolescente serbia no fue menester enseñarle que al llegar a la meta no habría repudio sino satisfacción.
En el fútbol argentino, ¿quién nos educará?
25/7/16
¡Flash!
-Se llama Estela. Sé que no tiene sentido seguir pensando en ella; ¿vos buscarías un billete de 100 perdido en el ómnibus dos días atrás?
-La plata dura poco sin dueño, especialmente en un lugar así.
-Con más razón, ella trabaja en el shopping de Vicente López.
-No, si lo tuyo es grandioso.
-...
-¿Te enamoraste de una vendedora de shopping en un viajecito a Buenos Aires?
-Estuve varios días a prueba en Platense, me quedaba a cuatro cuadras de la cancha el shopping.
-Al final, en Platense no quedaste, vas a seguir viviendo acá o sea que ya no da para pensar en... ¿cómo se llama?
-Estrella.
-¿Y qué te bajoneó más: que no te aceptara un club de la B o esta mujer?
-Lo de Platense lo esperaba. Aunque sea un chico, yo no soy un jugador grande.
-¿Cuántos años tiene Estrella?
-21.
-¿Facebook no tiene?
-Le di mi correo y no le pedí el de ella. Ya sé, ahorrate las críticas.
-Vos sabés lo que dice el viejo Freud de olvidos como el tuyo, ¿no? ¿Hasta para cometer errores sos razonable? Por eso me llama la atención que hayas vuelto al shopping después de verla una vez.
-Si en general soy razonable, mis ojos son harto razonables. En fin, ya veré de olvidarme.
-Se llama Estela. Sé que no tiene sentido seguir pensando en ella; ¿vos buscarías un billete de 100 perdido en el ómnibus dos días atrás?
-La plata dura poco sin dueño, especialmente en un lugar así.
-Con más razón, ella trabaja en el shopping de Vicente López.
-No, si lo tuyo es grandioso.
-...
-¿Te enamoraste de una vendedora de shopping en un viajecito a Buenos Aires?
-Estuve varios días a prueba en Platense, me quedaba a cuatro cuadras de la cancha el shopping.
-Al final, en Platense no quedaste, vas a seguir viviendo acá o sea que ya no da para pensar en... ¿cómo se llama?
-Estrella.
-¿Y qué te bajoneó más: que no te aceptara un club de la B o esta mujer?
-Lo de Platense lo esperaba. Aunque sea un chico, yo no soy un jugador grande.
-¿Cuántos años tiene Estrella?
-21.
-¿Facebook no tiene?
-Le di mi correo y no le pedí el de ella. Ya sé, ahorrate las críticas.
-Vos sabés lo que dice el viejo Freud de olvidos como el tuyo, ¿no? ¿Hasta para cometer errores sos razonable? Por eso me llama la atención que hayas vuelto al shopping después de verla una vez.
-Si en general soy razonable, mis ojos son harto razonables. En fin, ya veré de olvidarme.
23/7/16
Redondo terror
"Viaje a lo inesperado" fue un ciclo que por años, desde Canal 12 de Córdoba, hizo todo lo posible para que los sábados a la noche las familias no vieran televisión. Su efectivo método consistía en pasar películas de terror, ya fuera por el género o por su factura.
La administración del fútbol argentino, con un torneo cuya organización cambia de un día para otro, se le asemeja.
Los preparadores físicos diseñan las pretemporadas con la bola de cristal en la mano. Al comienzo intuyen por rumores que el torneo de fútbol empezará el 5 de agosto. Cuando finalizó el trabajo concebido para esa fecha se enteran de que el certamen comenzará el 26. Una semana más tarde saben que el inicio será una semana más temprano. El viaje a lo inesperado sigue, aunque Canal 12 ya no lo tenga en su grilla. La AFA juega a ser Canal Volver, pero con lo peor del pasado.
Una buena: la entidad se llama "Asociación del Fútbol Argentino". Sería demasiado cínico OFA (Organización del Fútbol Argentino).
"Viaje a lo inesperado" fue un ciclo que por años, desde Canal 12 de Córdoba, hizo todo lo posible para que los sábados a la noche las familias no vieran televisión. Su efectivo método consistía en pasar películas de terror, ya fuera por el género o por su factura.
La administración del fútbol argentino, con un torneo cuya organización cambia de un día para otro, se le asemeja.
Los preparadores físicos diseñan las pretemporadas con la bola de cristal en la mano. Al comienzo intuyen por rumores que el torneo de fútbol empezará el 5 de agosto. Cuando finalizó el trabajo concebido para esa fecha se enteran de que el certamen comenzará el 26. Una semana más tarde saben que el inicio será una semana más temprano. El viaje a lo inesperado sigue, aunque Canal 12 ya no lo tenga en su grilla. La AFA juega a ser Canal Volver, pero con lo peor del pasado.
Una buena: la entidad se llama "Asociación del Fútbol Argentino". Sería demasiado cínico OFA (Organización del Fútbol Argentino).
18/7/16
Perder es parte de la dicha
Adrián Ramírez no tiene tatuajes, evita el dolor corporal. Sin embargo, lee con fruición comentarios y noticias de su Boca, de su querido Boca, en las maduras y en las duras. Sabe que la vida depara sufrimientos y que otros, entre ellos los futbolísticos, llegan de tanto buscarlos. Ha aprendido que perder es preferible al dolor de ya no ser. Xeneize por siempre y en las malas mucho más.
Gracias, viejo, por enseñarme a ser feliz con esta hermosa identidad.
Ánimo, Ramírez
Suena la voz bellísima de Freddie Mercury. "Love of my life", en vivo, consigue que Adrián Ramírez haga contacto con la música y se dedique exclusivamente a ella durante la canción. Lo que le parecía raro cuando lo proponía el profesor Gianni en las clases de Psicología se le hacía sublime realidad 22 años después. Y lo ayudó a reanimarse tras algunas clases frustrantes, dolorosas, de las que se iba sintiendo que la docencia estaba en retirada allí donde la reflexión solo era cosa de espejo.
Adrián Ramírez no tiene tatuajes, evita el dolor corporal. Sin embargo, lee con fruición comentarios y noticias de su Boca, de su querido Boca, en las maduras y en las duras. Sabe que la vida depara sufrimientos y que otros, entre ellos los futbolísticos, llegan de tanto buscarlos. Ha aprendido que perder es preferible al dolor de ya no ser. Xeneize por siempre y en las malas mucho más.
Gracias, viejo, por enseñarme a ser feliz con esta hermosa identidad.
Ánimo, Ramírez
Suena la voz bellísima de Freddie Mercury. "Love of my life", en vivo, consigue que Adrián Ramírez haga contacto con la música y se dedique exclusivamente a ella durante la canción. Lo que le parecía raro cuando lo proponía el profesor Gianni en las clases de Psicología se le hacía sublime realidad 22 años después. Y lo ayudó a reanimarse tras algunas clases frustrantes, dolorosas, de las que se iba sintiendo que la docencia estaba en retirada allí donde la reflexión solo era cosa de espejo.
Final abierto
Aferrado con su mano derecha, el hombre de remera y vaqueros lleva tiempo luchando por no caer. Pende de una pared en una calle a uno de cuyos lados se ven escaleras de servicio de viviendas poco llamativas y enfrente, negocios para delicias turísticas.
Nadie le ofrece ayuda. Es un mural no publicitario de unos tres por diez metros, en el mismo blanco y negro con el que, pasos más allá y de cara al punto cardinal opuesto, Jennifer Aniston mira hacia arriba e invita a tomar un agua mineral cuya marca no fue registrada.
Los ojos de ella apuntan al cielo. A él se lo ve de espaldas, amarrado para no desplomarse.
Gallardo
Calla. Mira. Sigue. Ella no está disponible. El la ve a diario. Ella sonríe al lado de otro. El celebra su silencio –¿para qué incordiar?
Tantos años jugando al hándbol para aprender fuera de la cancha y sin árbitro lo que es saber perder...
Aferrado con su mano derecha, el hombre de remera y vaqueros lleva tiempo luchando por no caer. Pende de una pared en una calle a uno de cuyos lados se ven escaleras de servicio de viviendas poco llamativas y enfrente, negocios para delicias turísticas.
Nadie le ofrece ayuda. Es un mural no publicitario de unos tres por diez metros, en el mismo blanco y negro con el que, pasos más allá y de cara al punto cardinal opuesto, Jennifer Aniston mira hacia arriba e invita a tomar un agua mineral cuya marca no fue registrada.
Los ojos de ella apuntan al cielo. A él se lo ve de espaldas, amarrado para no desplomarse.
Gallardo
Calla. Mira. Sigue. Ella no está disponible. El la ve a diario. Ella sonríe al lado de otro. El celebra su silencio –¿para qué incordiar?
Tantos años jugando al hándbol para aprender fuera de la cancha y sin árbitro lo que es saber perder...
28/6/16
Desfachatez
El pavimento negro de Río Cuarto es flojo, se cuartea fácil. Quizás convenga usar en su lugar la cara de Nicolás Higuaín, que a fin de salvar a su hermano del incendio por su rutinario gol errado en finales dijo que "sin ofender la memoria de nadie", Ringo Bonavena es "un ídolo nacional y popular que nunca ganó nada".
A los yerros técnicos de Pipita, humo desde el sobrenombre, su hermano Nicolás le añadió un dato que no venía al caso y osó comparar al insulso 9 de la selección con alguien súper carismático que, discutible como era, alegraba desde su quehacer deportivo.
Nadie le pide a Nicolás que se pliegue a quienes fustigan a su hermano. Apenas alcanzaría con que no lo defendiera atacando a quien ya no está.
El pavimento negro de Río Cuarto es flojo, se cuartea fácil. Quizás convenga usar en su lugar la cara de Nicolás Higuaín, que a fin de salvar a su hermano del incendio por su rutinario gol errado en finales dijo que "sin ofender la memoria de nadie", Ringo Bonavena es "un ídolo nacional y popular que nunca ganó nada".
A los yerros técnicos de Pipita, humo desde el sobrenombre, su hermano Nicolás le añadió un dato que no venía al caso y osó comparar al insulso 9 de la selección con alguien súper carismático que, discutible como era, alegraba desde su quehacer deportivo.
Nadie le pide a Nicolás que se pliegue a quienes fustigan a su hermano. Apenas alcanzaría con que no lo defendiera atacando a quien ya no está.
24/6/16
Patetismo
Un tal Damián Dupiellet consideró que el Estado nacional incurría en "una clara intromisión" al enviar la Inspección General de Justicia a la Asociación del Fútbol Argentino.
No se ha quejado, en cambio, cuando la FIFA lo designó a él transitoriamente responsable de la desmadrada AFA.
Otro ejemplo de personajes que detestan las monarquías hasta que un rey los invita a sentarse en el trono.
Un tal Damián Dupiellet consideró que el Estado nacional incurría en "una clara intromisión" al enviar la Inspección General de Justicia a la Asociación del Fútbol Argentino.
No se ha quejado, en cambio, cuando la FIFA lo designó a él transitoriamente responsable de la desmadrada AFA.
Otro ejemplo de personajes que detestan las monarquías hasta que un rey los invita a sentarse en el trono.
9/6/16
¿Por qué hacer trabajos inútiles?
Hay muchos tipos de trabajos, pagos y no, o que se recibe algo a cambio. Muchas personas lo toman al trabajar como algo a cambio de algo y trabajar como algo que hacemos a cambio de algo y en muchos casos dinero, para mantenernos, o en todo caso, que nuestros padres necesitan para sacar adelante a la familia. Se puede decir que un trabajo es útil, pero yo diría que ninguno es inútil, porque todas las actividades que realizamos las hacemos porque tenemos la intención de hacerlas. Todo el tiempo estamos llevando a cabo trabajos y estos tienen un valor, sin importar si es con beneficios a cambio o no.
Por ejemplo, ¿es inútil ayudar en nuestras casas? ¿Es inútil escuchar a un amigo? ¿Es inútil tender la cama?
Mi respuesta a estas preguntas es que todos estos son trabajos que realizamos nosotros mismos o para los otros, que parecen inútiles, pero por un lado no lo son porque nos hacen ser personas, aunque parezca que en nuestras vidas pareciera que todo tiene que ser útil, por lo que recibimos a cambio.
Por eso yo pienso que ningún trabajo es inútil.
Hay muchos tipos de trabajos, pagos y no, o que se recibe algo a cambio. Muchas personas lo toman al trabajar como algo a cambio de algo y trabajar como algo que hacemos a cambio de algo y en muchos casos dinero, para mantenernos, o en todo caso, que nuestros padres necesitan para sacar adelante a la familia. Se puede decir que un trabajo es útil, pero yo diría que ninguno es inútil, porque todas las actividades que realizamos las hacemos porque tenemos la intención de hacerlas. Todo el tiempo estamos llevando a cabo trabajos y estos tienen un valor, sin importar si es con beneficios a cambio o no.
Por ejemplo, ¿es inútil ayudar en nuestras casas? ¿Es inútil escuchar a un amigo? ¿Es inútil tender la cama?
Mi respuesta a estas preguntas es que todos estos son trabajos que realizamos nosotros mismos o para los otros, que parecen inútiles, pero por un lado no lo son porque nos hacen ser personas, aunque parezca que en nuestras vidas pareciera que todo tiene que ser útil, por lo que recibimos a cambio.
Por eso yo pienso que ningún trabajo es inútil.
Por Francisca Vengerow, estudiante de tercer año, Colegio San Ignacio
2/6/16
¿Por qué las familias reconstituidas y las homosexuales son más frecuentes que nunca?
La respuesta a esta pregunta tiene mucho que ver con la evolución de la cultura argentina. Hasta hace menos de cincuenta años, Argentina era una sociedad mucho más religiosa y menos secularizada que hoy en día. Como la Iglesia Católica consideraba el divorcio y la homosexualidad pecados, aquellas personas que deseaban anular su matrimonio o expresar libremente su identidad sexual estaban más sujetas al prejuicio y al control social informal. Además, el divorcio y el matrimonio homosexual eran ilegales, es decir, también existía un control social formal basado en sanciones.
La respuesta a esta pregunta tiene mucho que ver con la evolución de la cultura argentina. Hasta hace menos de cincuenta años, Argentina era una sociedad mucho más religiosa y menos secularizada que hoy en día. Como la Iglesia Católica consideraba el divorcio y la homosexualidad pecados, aquellas personas que deseaban anular su matrimonio o expresar libremente su identidad sexual estaban más sujetas al prejuicio y al control social informal. Además, el divorcio y el matrimonio homosexual eran ilegales, es decir, también existía un control social formal basado en sanciones.
La gradual liberalización de los valores de la sociedad occidental puso a la
religión en un menos importante pero presente segundo plano y permitió la
sanción de la ley de divorcio, en 1987, y del matrimonio igualitario, en 2012.
Ya que, tanto en el sentido formal e informal, una parte del estigma que
rodeaba a estos temas desapareció, las familias reconstituidas (en la que al
menos uno de los miembros se ha divorciado/separado de su pareja anterior) y
las familias homosexuales son mucho más frecuentes porque sus miembros
obtuvieron la libertad de poder terminar una relación y expresar su sexualidad
sin temer tanto a la ley o a los vecinos como antes.
Por Ana Lucía Pereyra, estudiante de tercer año, Colegio San Ignacio
La relación entre el control social formal, el colegio, la familia y los medios de comunicación
El control social formal influencia a la escuela, a los medios y a la familia mediante la creación de normas que los regulan. Por ejemplo, en Argentina, los canales de televisión no muestran contenido no apto para todo público antes de las diez de la noche, ya que hay una ley que lo prohíbe. La ley también determina lo que las escuelas deben enseñar y, además, que este currículum se respete y el espacio sea apto para trabajar. Las leyes de divorcio, por ejemplo, también tuvieron influencia en las familias.
El control social formal influencia a la escuela, a los medios y a la familia mediante la creación de normas que los regulan. Por ejemplo, en Argentina, los canales de televisión no muestran contenido no apto para todo público antes de las diez de la noche, ya que hay una ley que lo prohíbe. La ley también determina lo que las escuelas deben enseñar y, además, que este currículum se respete y el espacio sea apto para trabajar. Las leyes de divorcio, por ejemplo, también tuvieron influencia en las familias.
Los medios de comunicación, como un agente de socialización
secundario, afectan tanto a la escuela como a la familia. La escuela puede usar
los medios como un recurso para enriquecer la enseñanza, por ejemplo, con los
vídeos del Canal Encuentro. Una película podría llegar a socializar a los niños
de una familia, transmitiendo mensajes y valores que luego pueden ser
discutidos por todos sus miembros. Además, la escuela afecta la dinámica
familiar en muchos aspectos – socializa a los que asisten a ellas y les enseña
nociones que pueden llegar a ser relevantes en el contexto de la casa (por
ejemplo, si un niño aprende a leer ya es capaz de ayudar con las compras) y
cambia su estilo de vida implementando nuevos horarios y obligaciones.
Por Ana Lucía Pereyra y
Delfina Sona, estudiantes de tercer año, Colegio San Ignacio
1/6/16
¿Cuál es el sentido?
Centralizándonos en la pregunta ¿por qué hacer trabajos que, en principio, son inútiles?
Centralizándonos en la pregunta ¿por qué hacer trabajos que, en principio, son inútiles?
Puede que
por los valores, cultura, costumbre, identidad de la familia uno hace trabajos
que en un principio son inútiles, pero al fin y al cabo tienen una utilidad. O
solo por el hecho de evitar conflictos en la socialización primaria (familia,
amigos) ya que si tu mamá te manda a mantener tu habitación ordenada, uno lo va
a hacer para evitar conflictos con la familia. O también por cuestión de
pasatiempos, ya que si a uno le gusta practicar algún deporte o hobby, va a ser
por preferencias personales, ya que no es esencial para la sociedad.
También
puede que por una cuestión de educación
y respeto hacia los demás, ya que si uno va a la casa de un amigo/a y ve que
él/ella está ayudando a poner la mesa, uno voy a ir y lo/la va a ayudar. Los valores
y la cultura que la persona tiene son establecidos por la misma familia.
Todas las
personas necesitamos nomas de comportamiento, las cuales son importantes para
que la convivencia con nuestros pares sea organizada y estas tienen que estar presentes en todas las instituciones
donde la persona asista. Por ejemplo mantener ordenada la casa, va a llevar a
que a convivencia sea más tranquila, teniendo en cuenta los valores que la
familia haya adquirido.
Cuando las
normas de convivencia no se respetan en la vivienda, se aplican sanciones o
castigos a la persona que no siguió las normas. Estas sanciones enseñan a
cumplir con las normas pautadas y respetar al prójimo. Pero a la vez cuando
estas normas son respetadas uno recibe “premios” para incentivar a la persona a
seguir realizando correctamente sus tareas planteadas. Esto aplica un
aprendizaje ya que a través de estos dos factores aprendes a comportarte.
Algunos
trabajos ”inútiles”, son por ejemplo, tender la cama, si al día siguiente la
vas a volver a destender, pero para que tu hermano no se enoje por tu desorden
que hay en la habitación que comparten, la tendrás que tender. Otro ejemplo, es
barrer el piso si al rato va a venir gente y va a volver a ensuciar, pero para
tener un ambiente mas limpio y presentable lo tendrás que limpiar.
Para
concluir, podemos decir que los trabajos inútiles, pasan a ser necesarios para
la vida cotidiana, ya que si algunos de estos no se realizan la convivencia en
la vivienda va a ser precaria.
Otero, María Paz y Ficco, Augusto, estudiantes de tercer año, Colegio San Ignacio
30/5/16
Le estamos errando
Claro fue el mensaje de los moderadores: aplausos, solo al final. Sin embargo, al promediar el debate de candidatos a intendente de Río Cuarto, partidarios de uno empezaron a batir palmas al cabo de un testimonio y otros los imitaron.
El Aula Mayor de la Universidad Nacional de Río Cuarto fue testigo de cuán fácil se rompe una norma inofensiva y de qué poco hicieron para que la cumplieran sus adeptos, varios de quienes aspiran al sillón de Mójica.
La situación de este lunes ayuda a entender, por ejemplo, por qué nuestro tránsito es insoportablemente anómico, caótico, indiferente a la ley.
Barras y llaves
En Feliz Domingo, programa de entretenimientos del Canal 9 de Alejandro Romay, uno de las formas de consagrar ganador era por cantidad de aplausos. Silvio Soldán acercaba el micrófono a la tribuna y la barra más sonora les daba el triunfo a sus compañeros de curso que habían actuado.
Parece que el método vale para la política. Candidatos a la intendencia de Río Cuarto poco y nada hicieron para que sus seguidores obedecieran la norma evitando aplaudir, acaso por suponer que la ciudadanía es un rebaño que sigue al pastor más ruidoso.
Así de similar al escenario de Feliz Domingo, ¿la buena gestión de la ciudad estará en el cofre de la felicidad, revuelta entre 24 llaves falsas?
Claro fue el mensaje de los moderadores: aplausos, solo al final. Sin embargo, al promediar el debate de candidatos a intendente de Río Cuarto, partidarios de uno empezaron a batir palmas al cabo de un testimonio y otros los imitaron.
El Aula Mayor de la Universidad Nacional de Río Cuarto fue testigo de cuán fácil se rompe una norma inofensiva y de qué poco hicieron para que la cumplieran sus adeptos, varios de quienes aspiran al sillón de Mójica.
La situación de este lunes ayuda a entender, por ejemplo, por qué nuestro tránsito es insoportablemente anómico, caótico, indiferente a la ley.
Barras y llaves
En Feliz Domingo, programa de entretenimientos del Canal 9 de Alejandro Romay, uno de las formas de consagrar ganador era por cantidad de aplausos. Silvio Soldán acercaba el micrófono a la tribuna y la barra más sonora les daba el triunfo a sus compañeros de curso que habían actuado.
Parece que el método vale para la política. Candidatos a la intendencia de Río Cuarto poco y nada hicieron para que sus seguidores obedecieran la norma evitando aplaudir, acaso por suponer que la ciudadanía es un rebaño que sigue al pastor más ruidoso.
Así de similar al escenario de Feliz Domingo, ¿la buena gestión de la ciudad estará en el cofre de la felicidad, revuelta entre 24 llaves falsas?
23/5/16
Sonidos del naufragio
Dos adultos mayores conversan en una mesa contigua de modo tal que no hay manera de evitar el aturdimiento. En ningún momento se piden repetición de frases, de modo que tamaña intensidad de voz se liga a la desubicación, no a la sordera.
Una mujer chista reiteradamente a un vasco de boina roja con dos prendedores. Quiere el diario que él tiene, pero no considera la opción "¿por favor, podría darme Puntal?". Más vale, que el otro se sienta un burro.
Acaso por problemas en la telefonía, un joven contesta a los gritos un llamado por celular. Con igual delicadeza, pronuncia: "Estoy contento, estoy con plata y no tuve que pasar por la aduana. Te quiero, mamuchi".
¿En qué momento nos olvidamos de que hay otros en el mundo?
¿Cuándo empezamos a confundir tosquedad con autenticidad?
¿Qué día nos empezamos a complacer en la vulgaridad?
Dos adultos mayores conversan en una mesa contigua de modo tal que no hay manera de evitar el aturdimiento. En ningún momento se piden repetición de frases, de modo que tamaña intensidad de voz se liga a la desubicación, no a la sordera.
Una mujer chista reiteradamente a un vasco de boina roja con dos prendedores. Quiere el diario que él tiene, pero no considera la opción "¿por favor, podría darme Puntal?". Más vale, que el otro se sienta un burro.
Acaso por problemas en la telefonía, un joven contesta a los gritos un llamado por celular. Con igual delicadeza, pronuncia: "Estoy contento, estoy con plata y no tuve que pasar por la aduana. Te quiero, mamuchi".
¿En qué momento nos olvidamos de que hay otros en el mundo?
¿Cuándo empezamos a confundir tosquedad con autenticidad?
¿Qué día nos empezamos a complacer en la vulgaridad?
7/5/16
"Cuando estoy frente a él le admiro su belleza y en silencio digo '¡qué hermoso es!'. Meneo apenas la cabeza y quizás se lea en mis ojos todo lo que me atrae". No importa que no sea fotogénico, que en Face salga desmejorado o quizás realmente sea así; lo veo y lo sigo viendo delicioso.
Está en pareja y no quiero armar lío, en especial porque creo que ni se imagina lo que me pasa".
Su compañera de pensión la escuchó y le dijo a Julieta que estaba enamorada y que su rol era como el de Anthony Hopkins en "Lo que queda del día". Su hermana le dio un abrazo.
Hay días en los que Julieta cree que su silencio es noble, otros en los que lamenta haberse callado cuando Adrián Ramírez estaba solo. Que nadie le cante aquello de "la historia vuelve a repetirse"...
Inmediatez fulminante
Algunos agradecimientos son agravios a la memoria. Una tribuna lateral del estadio de Quilmes lleva el nombre de su actual volante central, Rodrigo Braña. Nada de tributos a quienes se empeñaron económicamente por la grandeza de la institución. Tampoco un homenaje a José Yudica, entrenador campeón Metropolitano de 1978 -único título del club en Primera- y que lo guió para el ascenso a la A en 1981.
¿Merece elogios Braña? Sí. Decidió seguir en el club pese a que le deben más de cuatro salarios y recibió una oferta tentadora de Boca. Pero inmortalizarlo en una tribuna de un club centenario es demasiado. Salvo que, como es probable, su nombre sea borrado en unos meses, cuando el trono de lo inmediato lo ocupe otro monarca.
Banderita
Creer que ayer y mañana son palabras vanas no está mal para disfrutar hoy, claro que es en extremo perjudicial si implica desconocer causas de los hechos y consecuencias. Baste con recordar cómo termina -mea culpa- y más de una noche con numerosos vasos de cerveza y cuál fue su origen.
Hacer homenajes en vida es bueno. Pero de ahí a darle por un año la bandera al alumno de mejores notas en el último trimestre hay una distancia enorme. Que Rodrigo Braña, actual jugador de Quilmes, sea premiado con la imposición de su nombre para la tribuna de un club de más de 100 años es una bofetada al pasado. Y ya se sabe cómo suele ser el futuro de entidades así.
30/4/16
Miradas a lo cotidiano
En la clase de Sociology había que redactar un texto que, mediante conceptos de la asignatura, mostrara procesos de aprendizaje en la escuela y otros ámbitos. Por Luisina Camelino y Josefina Alarcón, estudiantes de tercer año del Colegio San Ignacio.
En la clase de Sociology había que redactar un texto que, mediante conceptos de la asignatura, mostrara procesos de aprendizaje en la escuela y otros ámbitos. Por Luisina Camelino y Josefina Alarcón, estudiantes de tercer año del Colegio San Ignacio.
Desde que nacemos y nos lanzamos hacia el
proceso de socialización, aprendemos a través de los medios de comunicación masiva, la familia y otros
agentes las expectativas acerca del comportamiento adecuado que debemos
llevar a lo largo de nuestra vida.
Además, cuando crecemos, los profesores en
la escuela continúan enseñándonos cómo comportarnos correctamente en relación
a nuestra cultura y a las expectativas que la población tiene sobre nosotros.
Como somos adolescentes, debido a nuestro estado de edad y al contexto en el que nos desarrollamos como personas y
estudiantes; en el ámbito escolar las personas más poderosas son los
profesores y los directivos, ya que ejercen su rol social como adultos. Y como
ellos son quienes deben transmitir el conocimiento hacia los estudiantes, con
la finalidad de aumentar/desarrollar sus chances de vida y sus habilidades para
poder ser aplicadas en un futuro no tan lejano; los adultos, en este caso
miembros del colegio San Ignacio, establecen normas de convivencia, con el
objetivo de mantener en orden el contexto, en relación con las expectativas que
el colegio tiene sobre nosotros, como una manera de ejercer control social (estas
normas que ellos utilizan pueden ser formales, como las notas o las sanciones que
se encuentran escritas, o pueden ser informales, las cuales no se encuentran
escritas, pero la mayoría de la gente las toma como obvias).
Sin
embargo, vale resaltar que no sólo
podemos encontrar esta forma de control social en la escuela, ya que
también se
hace presente en nuestra vida cotidiana. Este sistema es ejercido como
logro por medio del gobierno y de la ley. Con respecto a dicho sistema,
este se rige en premios y sanciones dados a las personas, con la
finalidad de
promover su esfuerzo. Y de manera acorde con sus acciones, las personas
recibirán premios o sanciones.
Por otra parte, dentro de la sociedad, cada
ciudadano tiene en claro cuál es la función que debe cumplir, a pesar de que
esta no se encuentre escrita formalmente (control social informal). Esto, a su
vez, se relaciona con la enseñanza recibida por la persona durante su proceso
de socialización.
Algo
que puede sorprendernos, es que a veces
estos aspectos mencionados anteriormente son afectados también por ideas
transmitidas desde otros países, por los medios, la escuela, el proceso
de
socialización, entre otros. Es decir, en nuestros días somos capaces de
notar en nuestro país una gran influencia, transmitida por una de las
grandes
potencias, como lo es Estados Unidos, la cual es transmitida por los medios (a través de canciones, revistas,
películas, series e incluso las estampas de las remeras o ropa que
vestimos usualmente), la escuela, desde
que el inglés se convirtió en la lengua universal, este adoptó una gran
importancia con respecto a la educación, por lo que en nuestros días podemos
notar que la mayoría de los colegios enseñan inglés; incluso podemos notar este
impacto en nuestro proceso de socialización, con el simple ejemplo de que
cuando éramos niños, algunos de nosotros, adquirimos como algo popular algunas
tradiciones provenientes ce otros países como lo es el ‘’Halloween’’.
En conclusión, es muy notoria la presencia
de este lenguaje en varios aspectos, podemos decir además, que con normalidad
utilizamos palabras, cuyos significados no conocemos en nuestra lengua nativa,
como por ejemplo: cassette, disc-man, delivery, etc.
28/4/16
Trampa caserita
Hipólito Yrigoyen y Bolívar, 18.40. Una mujer tambalea en su bicicleta y casi choca a un peatón. Le dice "perdón" y, junto a un hombre y una niña que van con ella en otras bicis, cruza pese a que el semáforo sigue en rojo.
Curiosa atención a las normas de cortesía al tiempo que se desobedecen las normas de tránsito y se maleduca en familia.
Si luego la niña copia en un examen escolar, ¿qué le dirá la mujer que le enseñó que la luz roja equivale a la verde?
Hipólito Yrigoyen y Bolívar, 18.40. Una mujer tambalea en su bicicleta y casi choca a un peatón. Le dice "perdón" y, junto a un hombre y una niña que van con ella en otras bicis, cruza pese a que el semáforo sigue en rojo.
Curiosa atención a las normas de cortesía al tiempo que se desobedecen las normas de tránsito y se maleduca en familia.
Si luego la niña copia en un examen escolar, ¿qué le dirá la mujer que le enseñó que la luz roja equivale a la verde?
¿Chicos... cuáles chicos?
"Los chicos" es el sobreimpreso recurrente de TN para referir a los cinco internados por presunto consumo de drogas en una fiesta de música electrónica. Según el diario La Capital, solo uno, de 17 años es menor de edad; los cuatro restantes tiene de 19 a 24 años.
Desde luego que una denominación televisiva no es responsable de la decisión de alguien de tomar pastillas a sabiendas de que son malas para la salud. Ahora bien, ¿ayuda a madurar aplicar el rótulo "chicos" a quienes ya están en edad de salir sin permiso del país, votar, manejar un auto y casarse? Además, ¿sería igual el calificativo si las personas de 19 a 24 años -o el muchacho de 17- robaran a mano armada?
"Los chicos" es el sobreimpreso recurrente de TN para referir a los cinco internados por presunto consumo de drogas en una fiesta de música electrónica. Según el diario La Capital, solo uno, de 17 años es menor de edad; los cuatro restantes tiene de 19 a 24 años.
Desde luego que una denominación televisiva no es responsable de la decisión de alguien de tomar pastillas a sabiendas de que son malas para la salud. Ahora bien, ¿ayuda a madurar aplicar el rótulo "chicos" a quienes ya están en edad de salir sin permiso del país, votar, manejar un auto y casarse? Además, ¿sería igual el calificativo si las personas de 19 a 24 años -o el muchacho de 17- robaran a mano armada?
Pregunta y ramalazos
"¿Por qué observar en vez de hacer encuestas?" era la pregunta a responder en el examen de Metodología. Adrián Ramírez apeló a un hecho reciente:
-Porque el viento de las acciones suele llevarse las palabras. Alguien puede llenarse la boca de paciencia y templanza hasta que anda por una calle de Río Cuarto, hace pedazos el tren delantero y larga una cadena de insultos que no alcanzan sapos, culebras ni otros dibujitos de historietas para representar su indignación ante una mala gestión que no maquillan carteles propagandísticos ni el consabido "disculpe las molestias. Estamos trabajando para usted". Si eso es trabajo, viva la vagancia.
"¿Por qué observar en vez de hacer encuestas?" era la pregunta a responder en el examen de Metodología. Adrián Ramírez apeló a un hecho reciente:
-Porque el viento de las acciones suele llevarse las palabras. Alguien puede llenarse la boca de paciencia y templanza hasta que anda por una calle de Río Cuarto, hace pedazos el tren delantero y larga una cadena de insultos que no alcanzan sapos, culebras ni otros dibujitos de historietas para representar su indignación ante una mala gestión que no maquillan carteles propagandísticos ni el consabido "disculpe las molestias. Estamos trabajando para usted". Si eso es trabajo, viva la vagancia.
13/4/16
Plurales sentidos
"Se viene el fin del mundo/ oh oh oh oh oh/", canturreaba Adrián Ramírez con la música de "Vamos a la playa". Lo miraban sin entender quienes no lo conocían, especialmente porque había salido el sol después de diez días de lluvia, niebla y humedad que afloraba por doquier.
La atribución de sentido varía de una persona a otra y aquello que a otros les parecía de mal gusto a él le resultaba ameno. La disparidad se aprecia en situaciones más relevantes, algunas de las cuales se detallan:
-Alguien anuncia que perderá quien apueste al dólar. Un oyente con vasta experiencia en ese país toma la frase como una broma o mentira mientras otro, que poco o nada conoce del pasado del lugar, elige no comprar dólares.
-Un médico diagnostica un mal, recibe insultos del paciente y lo adjudica a un enojo contra su mal desempeño. Su psicólogo lo lee distinto: el fastidio es ante la verdad.
-Un colectivero sonríe aunque le falten monedas para dar el vuelto y le pongas quejas por el precio del boleto que no ha decidido él. Hay quienes lo suponen cínico y otros saben que está enamorado.
-A un hombre de apariencia distinta a la de los recién llegados lo atan de pies y manos y lo sacan a pasear arrastrado por un caballo. En retrospectiva, algunos eligen interpretan el hecho como emergente de pautas de la época que se deben respetar; otros prefieren rotularlo de crueldad ayer, hoy y siempre.
Entre prejuicios, porfías, conveniencias, cobardías, convicciones, conocimientos, sentimientos, sensaciones y más transportes viajan los sentidos, también el que recibirá este texto.
"Se viene el fin del mundo/ oh oh oh oh oh/", canturreaba Adrián Ramírez con la música de "Vamos a la playa". Lo miraban sin entender quienes no lo conocían, especialmente porque había salido el sol después de diez días de lluvia, niebla y humedad que afloraba por doquier.
La atribución de sentido varía de una persona a otra y aquello que a otros les parecía de mal gusto a él le resultaba ameno. La disparidad se aprecia en situaciones más relevantes, algunas de las cuales se detallan:
-Alguien anuncia que perderá quien apueste al dólar. Un oyente con vasta experiencia en ese país toma la frase como una broma o mentira mientras otro, que poco o nada conoce del pasado del lugar, elige no comprar dólares.
-Un médico diagnostica un mal, recibe insultos del paciente y lo adjudica a un enojo contra su mal desempeño. Su psicólogo lo lee distinto: el fastidio es ante la verdad.
-Un colectivero sonríe aunque le falten monedas para dar el vuelto y le pongas quejas por el precio del boleto que no ha decidido él. Hay quienes lo suponen cínico y otros saben que está enamorado.
-A un hombre de apariencia distinta a la de los recién llegados lo atan de pies y manos y lo sacan a pasear arrastrado por un caballo. En retrospectiva, algunos eligen interpretan el hecho como emergente de pautas de la época que se deben respetar; otros prefieren rotularlo de crueldad ayer, hoy y siempre.
Entre prejuicios, porfías, conveniencias, cobardías, convicciones, conocimientos, sentimientos, sensaciones y más transportes viajan los sentidos, también el que recibirá este texto.
6/4/16
Placer, pesar
Adrián Ramírez tenía que escribir asociaciones a partir de "El artista", cuento de Oscar Wilde en el que alguien decide construir la escultura "El placer que dura un instante" y se vale para ello del bronce de la obra "El dolor que dura para siempre". A continuación, su lista:
La venganza, que suelta un peso y después llena un montacargas. La renuncia a un trabajo por cansancio final sin consciencia de la dicha anterior. La expresión de verdades tan inmensas como inútiles porque el otro no cambia y encima se ofende, mientras uno se culpa. La filtración periodística que deja al autor tan en evidencia que después se siente observado hasta por el radiograbador. El chisme contra un enemigo que a las pocas horas se revela absolutamente infundado. Lo que le pasa al protagonista de "Expreso de medianoche" y a tantos que por traficar drogas se ven envueltos en un sendero tortuoso. Lo que vive el hombre del tango "Chorra".
Adrián Ramírez tenía que escribir asociaciones a partir de "El artista", cuento de Oscar Wilde en el que alguien decide construir la escultura "El placer que dura un instante" y se vale para ello del bronce de la obra "El dolor que dura para siempre". A continuación, su lista:
La venganza, que suelta un peso y después llena un montacargas. La renuncia a un trabajo por cansancio final sin consciencia de la dicha anterior. La expresión de verdades tan inmensas como inútiles porque el otro no cambia y encima se ofende, mientras uno se culpa. La filtración periodística que deja al autor tan en evidencia que después se siente observado hasta por el radiograbador. El chisme contra un enemigo que a las pocas horas se revela absolutamente infundado. Lo que le pasa al protagonista de "Expreso de medianoche" y a tantos que por traficar drogas se ven envueltos en un sendero tortuoso. Lo que vive el hombre del tango "Chorra".
28/3/16
Dolores a elección
"Es preferible el dolor del sacrificio al dolor del remordimiento" es una frase que solía usar Juan Manuel Guerra, legendario entrenador del fútbol de ascenso, para incentivar a sus futbolistas al esfuerzo.
La vida puede considerarse una persistente elección de esfuerzos. Un padre puede sufrir por dos noches sin dormir velando una enfermedad de su hijo o por pasarlas de fiesta sin parar. El Cura Brochero optó por el dolor casi continuo por los miles de kilómetros recorridos en mula a los que le hubieran llegado, de vez en cuando, al pensar en lo que no había hecho. Día a día, multitud de hombres padecen por rechazos amorosos mientras otros se angustian porque no hablan.
La lista es mucho más extensa. Dolores... ¿Cuáles son tus elegidos?
"Es preferible el dolor del sacrificio al dolor del remordimiento" es una frase que solía usar Juan Manuel Guerra, legendario entrenador del fútbol de ascenso, para incentivar a sus futbolistas al esfuerzo.
La vida puede considerarse una persistente elección de esfuerzos. Un padre puede sufrir por dos noches sin dormir velando una enfermedad de su hijo o por pasarlas de fiesta sin parar. El Cura Brochero optó por el dolor casi continuo por los miles de kilómetros recorridos en mula a los que le hubieran llegado, de vez en cuando, al pensar en lo que no había hecho. Día a día, multitud de hombres padecen por rechazos amorosos mientras otros se angustian porque no hablan.
La lista es mucho más extensa. Dolores... ¿Cuáles son tus elegidos?
Fuentes: Sábado, historia del fútbol de ascenso y El beato cura Brochero. Más nuestro que el pan casero.
Falacias sobre la privacidad
Hay quienes confunden defensa de la privacidad con engaño. Son los que enseguida reclaman: "Si no me das tu clave de correo es porque andás de trampa" o "si no me mandás una foto plano general de tu casa es porque estás con alguien". Quizás las sospechas sean fundadas, pero no por eso deja de ser un desatino considerar deshonesto lo que se desea mantener en reserva. Si no, habría que pensar que todos quienes vivimos en casas con paredes de ladrillo lo hacemos para ocultar una cocina de droga, un cuartito para la trata de personas o quién sabe qué otra actividad delictiva.
Al lado
Están los que se aferran al derecho a la privacidad para justificar su indiferencia o miedo a la denuncia. De la vivienda de al lado provienen gritos, ruidos de cadenazos, botellas que se estrellan contra la pared, entre otros.
"Ah, yo pensé que grababan un radioteatro", es uno de los latiguillos que excusan al vecino, cómodamente echado en el sillón frente al televisor. "Cada hogar es un mundo", es otro de los pretextos por los que se busca hacer de la casa contigua una nación cuya soberanía por nada del mundo se quiere vulnerar.
Atribuciones
Supongamos que Mirna Lemans es la reina de la sutileza, que mantiene la elegancia en televisión hasta cuando come un pancho que chorrea mostaza. Imaginemos que ama ser vista al punto de saludar y ofrecer autógrafos a las cámaras de control de tránsito. Disfruta con la exposición.
¿Da derecho esto de fotografiarla subrepticiamente mientras se limpia las manos en el mantel tras mancharse la camisa con el chimichurri del choripán? No, claro que no.
¿Y si vive subiendo a Facebook imágenes de este tipo? Tampoco. Si no, cualquiera tendría derecho de robarle dinero a una persona y dárselo a un pobre si ha visto que por lo común ella lo donaba.
Evaluación
De un diálogo con estudiantes del Programa Educativo de Adultos Mayores surgió esta lectura: a menudo se mira sin ver el derecho a la privacidad y se juzga que se ataca la privacidad cuando se espía por una ventana, se roba una foto, se lee un diario ajeno. Ahora bien, ¿qué pasa cuando se esparce un rumor relativo a la intimidad de alguien? La conclusión fue que también eso es romper la privacidad. La buena noticia es que el diálogo hizo consciente lo que la lengua tantas veces ejecuta automáticamente.
22/3/16
Fútbol, delito de multitudes
Las sociedades tienen la facultad de correr los límites de la ciencia ficción. En un lugar donde la diversidad es norma resulta inverosímil la disputa de un partido de fútbol entre cascotazos, ataques con gas pimienta e hinchas de un solo equipo.
En un contexto en el cual la violencia se ha institucionalizado la postal no es fantástica sino cotidiana.
¿Qué nos pasó, Manfredi? -preguntó desolado Leopoldo, el ludópata encarnado por Alfredo Alcón en la serie Vulnerables, a uno de sus compañeros de póker, detenido por la acusación de un traidor que solía jugar con ellos a los naipes en el garito.
¿Qué nos pasó, Argentina? -cabe interrogar frente a la ya endémica intolerancia de nuestro fútbol.
Por estas horas, el plantel de Sarmiento vuelve a Junín llevando a cuestas no solamente la derrota ante Rosario Central que lo mantiene hundido en el descenso sino también el disgusto de haber sufrido la coerción de la barra brava, a la cual le respondió a los golpes.
El hecho registra antecedentes. En 1988, días antes de que venciera a Racing en la final de la Liguilla y clasificara así a la Copa Libertadores, hubo un ida y vuelta entre el plantel de San Lorenzo y barras del club que dejó al entonces entrenador Héctor Veira con intenso dolor en las costillas. En 1981, el núcleo rapaz de la hinchada de Boca entró en La Candela, donde concentraba el equipo, y a punta de pistola pidió la obtención del campeonato Metropolitano. En 1993, semanas después de la coronación xeneize por el Apertura de 1992, un barrabrava de River le lanzó al técnico Daniel Passarella un puñal que por centímetros no se le clavó en la cabeza. ¿Supuesto motivo? No aportar dinero para la manutención de los malvivientes.
En 2013, un hincha de Racing es hallado muerto en la pileta de la subsede del club en Villa del Parque, ciudad de Buenos Aires. Su deceso no fue por causas naturales.
En 2014, en el predio de Villa Dominico, aparecen perros muertos colgados, en un macabro gesto de disconformidad de la barra de Independiente ante el rendimiento de los futbolistas durante el torneo que El Rojo pasó en el Nacional B.
El traidor en Vulnerables no era el único culpable de que las partidas de póker se hubieran transformado en un toma y daca con dinero de por medio, así como los barras no son los responsables monopólicos de la violencia en el principal deporte argentino.
Repasar hechos como los precitados de los cinco grandes conllevaría una nota inacabable. A otros países, tamaña lista les luce apenas menos creíble que los hechos de la película "Star Wars". A nosotros, futboleros argentinos, nos resta esperar la próxima crónica futbolístico policial.
Fuentes: revista El Gráfico, diarios La Nación y Olé.
Las sociedades tienen la facultad de correr los límites de la ciencia ficción. En un lugar donde la diversidad es norma resulta inverosímil la disputa de un partido de fútbol entre cascotazos, ataques con gas pimienta e hinchas de un solo equipo.
En un contexto en el cual la violencia se ha institucionalizado la postal no es fantástica sino cotidiana.
¿Qué nos pasó, Manfredi? -preguntó desolado Leopoldo, el ludópata encarnado por Alfredo Alcón en la serie Vulnerables, a uno de sus compañeros de póker, detenido por la acusación de un traidor que solía jugar con ellos a los naipes en el garito.
¿Qué nos pasó, Argentina? -cabe interrogar frente a la ya endémica intolerancia de nuestro fútbol.
Por estas horas, el plantel de Sarmiento vuelve a Junín llevando a cuestas no solamente la derrota ante Rosario Central que lo mantiene hundido en el descenso sino también el disgusto de haber sufrido la coerción de la barra brava, a la cual le respondió a los golpes.
El hecho registra antecedentes. En 1988, días antes de que venciera a Racing en la final de la Liguilla y clasificara así a la Copa Libertadores, hubo un ida y vuelta entre el plantel de San Lorenzo y barras del club que dejó al entonces entrenador Héctor Veira con intenso dolor en las costillas. En 1981, el núcleo rapaz de la hinchada de Boca entró en La Candela, donde concentraba el equipo, y a punta de pistola pidió la obtención del campeonato Metropolitano. En 1993, semanas después de la coronación xeneize por el Apertura de 1992, un barrabrava de River le lanzó al técnico Daniel Passarella un puñal que por centímetros no se le clavó en la cabeza. ¿Supuesto motivo? No aportar dinero para la manutención de los malvivientes.
En 2013, un hincha de Racing es hallado muerto en la pileta de la subsede del club en Villa del Parque, ciudad de Buenos Aires. Su deceso no fue por causas naturales.
En 2014, en el predio de Villa Dominico, aparecen perros muertos colgados, en un macabro gesto de disconformidad de la barra de Independiente ante el rendimiento de los futbolistas durante el torneo que El Rojo pasó en el Nacional B.
El traidor en Vulnerables no era el único culpable de que las partidas de póker se hubieran transformado en un toma y daca con dinero de por medio, así como los barras no son los responsables monopólicos de la violencia en el principal deporte argentino.
Repasar hechos como los precitados de los cinco grandes conllevaría una nota inacabable. A otros países, tamaña lista les luce apenas menos creíble que los hechos de la película "Star Wars". A nosotros, futboleros argentinos, nos resta esperar la próxima crónica futbolístico policial.
Fuentes: revista El Gráfico, diarios La Nación y Olé.
21/3/16
Control social implacable
Es un simplismo sostener que una persona obra por lo que otras dicen. También lo es afirmar que las críticas, el chisme, las miradas de soslayo, los silencios repentinos cuando uno llega no hacen mella alguna.
En la serie "Niños robados" (basada en hechos reales, disponible en Youtube), Ricardo decide que comprará un bebé para su esposa que no puede quedar embarazada. "No aguanto más", "llevamos años oyendo esos comentarios", se justifica ante Elisa, su mujer, que también sufre los comentarios mordaces de la familia que los condena por no ser padres.
"Hay formas de hacerlo sin que nadie se entere", agrega Ricardo, al tanto del accionar tenebroso de sor Eulalia, quien estragó vidas desde sus hábitos junto al doctor Mena, que de médico tenía el guardapolvo.
Optar por una ilegalidad de las fuleras, la de participar del tráfico de bebés, con tal de no soportar un día a día arduo es lo que resolvieron Ricardo y Elisa.
Sin llegar al delito, otros hombres y mujeres decidieron en contra de sí mismos y de terceros y se casaron pese a no amarse, no fuera cuestión de quedar bajo sospecha de homosexualidad.
Sociedades, mandatos, juicios, condenas...
Es un simplismo sostener que una persona obra por lo que otras dicen. También lo es afirmar que las críticas, el chisme, las miradas de soslayo, los silencios repentinos cuando uno llega no hacen mella alguna.
En la serie "Niños robados" (basada en hechos reales, disponible en Youtube), Ricardo decide que comprará un bebé para su esposa que no puede quedar embarazada. "No aguanto más", "llevamos años oyendo esos comentarios", se justifica ante Elisa, su mujer, que también sufre los comentarios mordaces de la familia que los condena por no ser padres.
"Hay formas de hacerlo sin que nadie se entere", agrega Ricardo, al tanto del accionar tenebroso de sor Eulalia, quien estragó vidas desde sus hábitos junto al doctor Mena, que de médico tenía el guardapolvo.
Optar por una ilegalidad de las fuleras, la de participar del tráfico de bebés, con tal de no soportar un día a día arduo es lo que resolvieron Ricardo y Elisa.
Sin llegar al delito, otros hombres y mujeres decidieron en contra de sí mismos y de terceros y se casaron pese a no amarse, no fuera cuestión de quedar bajo sospecha de homosexualidad.
Sociedades, mandatos, juicios, condenas...
9/3/16
Dichoso saludo
El viejo Harvey Lipschultz daba clases por inercia; reconocía públicamente que había perdido las ganas cansado de burocracia y afectado por sus propias negligencias. La formidable serie "Boston public", relativa a un secundario estadounidense, también lo mostró recibiendo cálidos saludos de exalumnos, quizás de los que lo habían tenido antes de su declinación. Ese día, Lipschultz se quedó después de hora en el aula corrigiendo con ganas.
"Hay gente necesaria", dice Hamlet Lima Quintana. Como esos exalumnos y otros que caminan por Río Cuarto. Están "a la vuelta de la esquina", accesibles al salir del ensimismamiento.
8/3/16
Prensa, otro femenino que sufre
Basta la coerción del intendente de un pequeño pueblo para que una nota al candidato opositor sea censurada. La novela "Los ricos no piden permiso" expone una realidad. La escena puede no incluir matones rentados por el poder ejecutivo sino un llamado telefónico al dueño del diario para que despida al periodista, la cancelación del apoyo publicitario al medio u otros mecanismos para la disuasión.
La libertad de prensa, como el día de la mujer, es una hermosa idea rodeada de espinas.
Basta la coerción del intendente de un pequeño pueblo para que una nota al candidato opositor sea censurada. La novela "Los ricos no piden permiso" expone una realidad. La escena puede no incluir matones rentados por el poder ejecutivo sino un llamado telefónico al dueño del diario para que despida al periodista, la cancelación del apoyo publicitario al medio u otros mecanismos para la disuasión.
La libertad de prensa, como el día de la mujer, es una hermosa idea rodeada de espinas.
1/3/16
Al oscuro
Mil millones de personas viven sin acceso a la energía eléctrica. El dato suministrado por "Gates notes", publicación de Bill y Melinda Gates, lleva a pensar que, si estás leyendo esto, es sumamente probable que no seas uno de los postergados.
De hecho, es difícil que un seguidor de este blog viva en Africa subsahariana o sea uno de los 300 millones de seres humanos que en la India pasan sus días sin que sus dedos opriman botones y llaves para prender computadoras, lámparas, tubos fluorescentes, levanten la tapa de un freezer, abran la heladera, etc.
Ni televisión por cable, ni lavarropas automático, ni secarropas, ni horno microondas, ni grill, ni aire acondicionado, ni...
Parte de la vida consiste en prepararse para aceptar el no. Para adaptarse a los ni. Claro que esa parte de la vida parece ser pequeña para tu y yo y muy grande para los mil millones que no necesitan andar de boliche en boliche para vivir casi siempre de noche.
"Tanta luz para nuestras habitaciones y tanta oscuridad en algunas decisiones", pensó Adrián Ramírez, que recordaba algunas elecciones francamente desatinadas.
Mil millones de personas viven sin acceso a la energía eléctrica. El dato suministrado por "Gates notes", publicación de Bill y Melinda Gates, lleva a pensar que, si estás leyendo esto, es sumamente probable que no seas uno de los postergados.
De hecho, es difícil que un seguidor de este blog viva en Africa subsahariana o sea uno de los 300 millones de seres humanos que en la India pasan sus días sin que sus dedos opriman botones y llaves para prender computadoras, lámparas, tubos fluorescentes, levanten la tapa de un freezer, abran la heladera, etc.
Ni televisión por cable, ni lavarropas automático, ni secarropas, ni horno microondas, ni grill, ni aire acondicionado, ni...
Parte de la vida consiste en prepararse para aceptar el no. Para adaptarse a los ni. Claro que esa parte de la vida parece ser pequeña para tu y yo y muy grande para los mil millones que no necesitan andar de boliche en boliche para vivir casi siempre de noche.
"Tanta luz para nuestras habitaciones y tanta oscuridad en algunas decisiones", pensó Adrián Ramírez, que recordaba algunas elecciones francamente desatinadas.
18/2/16
Diarios que se cierran
Alejandro Dolina supo ironizar sobre un cuartel de bomberos cuyo teléfono funcionaba con un contestador automático que, de tantas opciones que ofrecía, demoraba el servicio hasta que todo era ceniza.
De mucho menor gravedad, aunque no menor tardanza, es el acceso a algunos diarios que requieren al lector iniciar sesión en Facebook. El caso es que, por ejemplo, uno desea leer la nota de un partido y cuando script y el sistema habilitan la visión del texto ya se está jugando la revancha.
A tales alturas, el cartelito "último momento" es una burla.
Alejandro Dolina supo ironizar sobre un cuartel de bomberos cuyo teléfono funcionaba con un contestador automático que, de tantas opciones que ofrecía, demoraba el servicio hasta que todo era ceniza.
De mucho menor gravedad, aunque no menor tardanza, es el acceso a algunos diarios que requieren al lector iniciar sesión en Facebook. El caso es que, por ejemplo, uno desea leer la nota de un partido y cuando script y el sistema habilitan la visión del texto ya se está jugando la revancha.
A tales alturas, el cartelito "último momento" es una burla.
11/2/16
Emisores, recortes, verdades
¿Está bien decir una verdad incómoda de alguien que se dedica hoy a lo que uno realizó ayer?
Kareem Abdul Jabaar es el imbatido goleador histórico de la NBA. Con buen ojo, apunta que Dirk Nowitzky, jugador de Dallas que hoy está entre los diez máximos anotadores de todos los tiempos, tiene una sola habilidad.
Por un lado, aplausos a quien le sacó a su única destreza un provecho tan grande que lo llevó a ubicarse décimo entre miles de basquetbolistas a lo largo de décadas.
Por otro, Jabaar marcó una realidad, incluso a riesgo de exagerar: su colega actual defiende poco y no es conductor de acciones ofensivas.
Si Jabaar tira ondas de amor y paz (símil Quique Wolff en Simplemente Fútbol), el receptor tiene derecho de quejarse por su corporativismo en desmedro de la sinceridad.
Si el goleador retirado opta por hacer que sus palabras respondan a los hechos, el jugador a quien refiere probablemente se ofenda. O tenga el temple y la humildad, descontando la inteligencia, para escuchar y mejorar.
¿Está bien decir una verdad incómoda de alguien que se dedica hoy a lo que uno realizó ayer?
Kareem Abdul Jabaar es el imbatido goleador histórico de la NBA. Con buen ojo, apunta que Dirk Nowitzky, jugador de Dallas que hoy está entre los diez máximos anotadores de todos los tiempos, tiene una sola habilidad.
Por un lado, aplausos a quien le sacó a su única destreza un provecho tan grande que lo llevó a ubicarse décimo entre miles de basquetbolistas a lo largo de décadas.
Por otro, Jabaar marcó una realidad, incluso a riesgo de exagerar: su colega actual defiende poco y no es conductor de acciones ofensivas.
Si Jabaar tira ondas de amor y paz (símil Quique Wolff en Simplemente Fútbol), el receptor tiene derecho de quejarse por su corporativismo en desmedro de la sinceridad.
Si el goleador retirado opta por hacer que sus palabras respondan a los hechos, el jugador a quien refiere probablemente se ofenda. O tenga el temple y la humildad, descontando la inteligencia, para escuchar y mejorar.
Esperanza de ahogado
Las excepciones se aprenden luego de dominar las reglas ortográficas. Si no, la confusión arrecia y alguien puede escribir "mais" y "maízes". En fútbol pasa de modo análogo: se apela a las rarezas tras comprobar que el vasto campo de lo normal deja un margen casi nulo para la esperanza. Por eso, hoy asoma en el hincha de Boca el recuerdo de Newell's, que dirigido por Marcelo Bielsa empezó la Libertadores de 1992 perdiendo 6-0 de local ante San Lorenzo y concluyó ese mismo semestre coronándose en el torneo local y como subcampeón del máximo certamen continental.
Diez años antes, en 1982, Italia empató los 3 partidos de la primera fase del Mundial, hizo apenas dos goles, fue criticada por propios y extraños, y acabó superando 3-1 a Alemania en la final y levantando la copa del mundo.
Las excepciones se aprenden luego de dominar las reglas ortográficas. Si no, la confusión arrecia y alguien puede escribir "mais" y "maízes". En fútbol pasa de modo análogo: se apela a las rarezas tras comprobar que el vasto campo de lo normal deja un margen casi nulo para la esperanza. Por eso, hoy asoma en el hincha de Boca el recuerdo de Newell's, que dirigido por Marcelo Bielsa empezó la Libertadores de 1992 perdiendo 6-0 de local ante San Lorenzo y concluyó ese mismo semestre coronándose en el torneo local y como subcampeón del máximo certamen continental.
Diez años antes, en 1982, Italia empató los 3 partidos de la primera fase del Mundial, hizo apenas dos goles, fue criticada por propios y extraños, y acabó superando 3-1 a Alemania en la final y levantando la copa del mundo.
7/2/16
Aprender a vivir
"Papá, me piden un ejemplo de socialización".
Adrián Ramírez miró a su hijo, llevó sus manos al mentón, sonrió y evocó: "¿Viste que vos hablás del gol de Perotti a Ferro en 1981? Vos sos del 2002 y creciste viendo televisión led y sacando fotos digitales. A vos no te gusta ver el video en Youtube por la calidad de imagen, si lo has visto varias veces es porque aprendiste en casa a sentir que Boca es importante, que el fútbol es una forma de ser feliz y que hay momentos que no puede olvidar el que los vivió y que vale la pena conocer si uno nació después. Escribí algo de esto, si querés sumale que el aprendizaje lo confirmaste entre abrazos y también algunas lágrimas, y ponele un título como los que te gusta leer en los Gráficos viejos".
"Papá, me piden un ejemplo de socialización".
Adrián Ramírez miró a su hijo, llevó sus manos al mentón, sonrió y evocó: "¿Viste que vos hablás del gol de Perotti a Ferro en 1981? Vos sos del 2002 y creciste viendo televisión led y sacando fotos digitales. A vos no te gusta ver el video en Youtube por la calidad de imagen, si lo has visto varias veces es porque aprendiste en casa a sentir que Boca es importante, que el fútbol es una forma de ser feliz y que hay momentos que no puede olvidar el que los vivió y que vale la pena conocer si uno nació después. Escribí algo de esto, si querés sumale que el aprendizaje lo confirmaste entre abrazos y también algunas lágrimas, y ponele un título como los que te gusta leer en los Gráficos viejos".
Emisores, recortes, verdades
¿Está bien decir una verdad incómoda de alguien que se dedica hoy a lo que uno realizó ayer?
Kareem Abdul Jabaar es el imbatido goleador histórico de la NBA. Con buen ojo, apunta que Dirk Nowitzky, jugador de Dallas que hoy está entre los diez máximos anotadores de todos los tiempos, tiene una sola habilidad.
Por un lado, aplausos a quien le sacó a su única destreza un provecho tan grande que lo llevó a ubicarse décimo entre miles de basquetbolistas a lo largo de décadas.
Por otro, Jabaar marcó una realidad, incluso a riesgo de exagerar: su colega actual defiende poco y no es conductor de acciones ofensivas.
Si Jabaar tira ondas de amor y paz (símil Quique Wolff en Simplemente Fútbol), el receptor tiene derecho de quejarse por su corporativismo en desmedro de la sinceridad.
Si el goleador retirado opta por hacer que sus palabras respondan a los hechos, el jugador a quien refiere probablemente se ofenda. O tenga el temple y la humildad, descontando la inteligencia, para escuchar y mejorar.
¿Está bien decir una verdad incómoda de alguien que se dedica hoy a lo que uno realizó ayer?
Kareem Abdul Jabaar es el imbatido goleador histórico de la NBA. Con buen ojo, apunta que Dirk Nowitzky, jugador de Dallas que hoy está entre los diez máximos anotadores de todos los tiempos, tiene una sola habilidad.
Por un lado, aplausos a quien le sacó a su única destreza un provecho tan grande que lo llevó a ubicarse décimo entre miles de basquetbolistas a lo largo de décadas.
Por otro, Jabaar marcó una realidad, incluso a riesgo de exagerar: su colega actual defiende poco y no es conductor de acciones ofensivas.
Si Jabaar tira ondas de amor y paz (símil Quique Wolff en Simplemente Fútbol), el receptor tiene derecho de quejarse por su corporativismo en desmedro de la sinceridad.
Si el goleador retirado opta por hacer que sus palabras respondan a los hechos, el jugador a quien refiere probablemente se ofenda. O tenga el temple y la humildad, descontando la inteligencia, para escuchar y mejorar.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)